Internacional
Adam Lanza anticipó sus planes en Internet
"Mi suicidio, en todas las pantallas del país":
"Este viernes voy a suicidarme. Pronto, en todas las pantallas del país. Siga las noticias en la tele a las 9", escribió alguien con el nombre iKTatjYX en la una página web.
Los visitantes del portal lo trataron con ironía, le desearon suerte y le preguntaron dónde iba a hacerlo y dónde vivía. La respuesta fue: "Sólo puedo decir que en Connecticut".
La identidad del autor de este mensaje no ha sido comprobada, la Policía está averiguando los datos.
Según reveló la Policía, Adam Lanza no tenía un perfil en Facebook, pero era un activo usuario de Internet y solía visitar varios foros virtuales. En la vida real el joven no era muy sociable, no tenía muchos amigos y prefería pasar desapercibido.
Su hermano Rayan Lanza asegura que Adam era "un tanto autista", mientras que sus vecinos lo describen como una persona rara, que sufría del trastorno obsesivo compulsivo. Su tío Jonathan Lanza destacó que el joven estaba tomando fármacos para la esquizofrenia.
"Todos los que conocían a su familia discutían el hecho que Lanza sentía a la escuela como una ofensa. Suponíamos que algún día esto podría resultar en algo horrible", comentan sus vecinos.
Tras saber que su hijo mató a 27 personas, incluso su propia madre, el padre del tirador, Peter Lanza, señaló que "no hay palabras para expresar lo rotos que estamos" e indicó que su familia está "afligida junto con todos los afectados por esta horrible tragedia".
"Estamos en un estado de incredulidad", añadió Peter Lanza. Él se divorció de Nancy, la madre del asesino, hace una decena de años, lo que, según sus vecinos, habría afectado a los dos hijos de la pareja.
Masacre histórica
El tiroteo en la escuela primaria Sandy Hook de Newtown en el estado de Connecticut el pasado viernes se saldó con la vida de 28 personas, incluidos 20 niños y el propio Adam, que se suicidó, y su madre. Lanza, portaba cuatro armas y un chaleco antibalas. Además la Policía encontró que el joven tenía centenares de proyectiles, como para matar a al menos 700 personas o a todos los alumnos de la escuela. Es el segundo hecho más sangriento en la historia de EE.UU.
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"Este viernes voy a suicidarme. Pronto, en todas las pantallas del país. Siga las noticias en la tele a las 9", escribió alguien con el nombre iKTatjYX en la una página web.
Los visitantes del portal lo trataron con ironía, le desearon suerte y le preguntaron dónde iba a hacerlo y dónde vivía. La respuesta fue: "Sólo puedo decir que en Connecticut".
La identidad del autor de este mensaje no ha sido comprobada, la Policía está averiguando los datos.
Según reveló la Policía, Adam Lanza no tenía un perfil en Facebook, pero era un activo usuario de Internet y solía visitar varios foros virtuales. En la vida real el joven no era muy sociable, no tenía muchos amigos y prefería pasar desapercibido.
Su hermano Rayan Lanza asegura que Adam era "un tanto autista", mientras que sus vecinos lo describen como una persona rara, que sufría del trastorno obsesivo compulsivo. Su tío Jonathan Lanza destacó que el joven estaba tomando fármacos para la esquizofrenia.
"Todos los que conocían a su familia discutían el hecho que Lanza sentía a la escuela como una ofensa. Suponíamos que algún día esto podría resultar en algo horrible", comentan sus vecinos.
Tras saber que su hijo mató a 27 personas, incluso su propia madre, el padre del tirador, Peter Lanza, señaló que "no hay palabras para expresar lo rotos que estamos" e indicó que su familia está "afligida junto con todos los afectados por esta horrible tragedia".
"Estamos en un estado de incredulidad", añadió Peter Lanza. Él se divorció de Nancy, la madre del asesino, hace una decena de años, lo que, según sus vecinos, habría afectado a los dos hijos de la pareja.
Masacre histórica
El tiroteo en la escuela primaria Sandy Hook de Newtown en el estado de Connecticut el pasado viernes se saldó con la vida de 28 personas, incluidos 20 niños y el propio Adam, que se suicidó, y su madre. Lanza, portaba cuatro armas y un chaleco antibalas. Además la Policía encontró que el joven tenía centenares de proyectiles, como para matar a al menos 700 personas o a todos los alumnos de la escuela. Es el segundo hecho más sangriento en la historia de EE.UU.