Internacional
Bomba en el corazón del euro
Francia se puede convertir en el mayor peligro para la moneda única europea
La amenaza de un colapso del euro ha disminuido, por el momento, pero enderezar la moneda única implicará años de dolor. La presión para la reforma y los recortes de presupuesto es más virulenta en Grecia, Portugal, España e Italia (...) Más allá se vislumbra un problema mayor que podría empequeñecer cualquiera de estos: Francia.
El país ha estado siempre en el corazón del euro, y de la Unión Europea. (...) Francia ha ganado con el euro: toma prestado a tipos bajos como nunca y ha evitado los problemas del Mediterráneo. Sin embargo, incluso antes de mayo, cuando François Hollande se convirtió en presidente del país (...) Francia había cedido el liderazgo a Alemania en la crisis del euro. Y ahora su economía se ve cada vez más vulnerable.
Con audacia y agallas suficientes el señor Hollande podría ahora reformar Francia. (...) Sin embargo, frente a la gravedad de los problemas económicos de Francia, el señor Hollande sigue pareciendo poco entusiasta.
(...) Los Gobiernos europeos que han emprendido grandes reformas lo han hecho porque había una profunda sensación de crisis, porque los votantes creían que no había alternativa y porque los líderes políticos tenían la convicción de que el cambio era inevitable. Nada de esto describe al señor Hollande o a Francia.
(...) Está en juego no solo el futuro de Francia, sino el del euro. (...) La crisis podría llegar a principios del año que viene. (...) Hollande no tiene mucho tiempo para desactivar la bomba de relojería en el corazón de Europa.
| La amenaza de un colapso del euro ha disminuido, por el momento, pero enderezar la moneda única implicará años de dolor. La presión para la reforma y los recortes de presupuesto es más virulenta en Grecia, Portugal, España e Italia (...) Más allá se vislumbra un problema mayor que podría empequeñecer cualquiera de estos: Francia.
El país ha estado siempre en el corazón del euro, y de la Unión Europea. (...) Francia ha ganado con el euro: toma prestado a tipos bajos como nunca y ha evitado los problemas del Mediterráneo. Sin embargo, incluso antes de mayo, cuando François Hollande se convirtió en presidente del país (...) Francia había cedido el liderazgo a Alemania en la crisis del euro. Y ahora su economía se ve cada vez más vulnerable.
Con audacia y agallas suficientes el señor Hollande podría ahora reformar Francia. (...) Sin embargo, frente a la gravedad de los problemas económicos de Francia, el señor Hollande sigue pareciendo poco entusiasta.
(...) Los Gobiernos europeos que han emprendido grandes reformas lo han hecho porque había una profunda sensación de crisis, porque los votantes creían que no había alternativa y porque los líderes políticos tenían la convicción de que el cambio era inevitable. Nada de esto describe al señor Hollande o a Francia.
(...) Está en juego no solo el futuro de Francia, sino el del euro. (...) La crisis podría llegar a principios del año que viene. (...) Hollande no tiene mucho tiempo para desactivar la bomba de relojería en el corazón de Europa.