Internacional
Lavrov apoyó desde el principio los esfuerzos del enviado especial a Siria
Lavrov exige de todos los actores exteriores asumir su responsabilidad ante [la actitud de] las partes que apoyan en Siria
El canciller ruso, Sergei Lavrov, afirmó que Rusia apoyó desde el principio, los esfuerzos del enviado especial de la ONU a Siria, Lakhdar Brahimi, para resolver la crisis en ese país, apaciguar la situación e iniciar un diálogo político cuanto antes; puntos recogidos por la declaración final de Ginebra, expresando su inquietud ante el recrudecimiento de la violencia en Siria.
En una rueda de prensa conjunta celebrada en Moscú con Brahimi, el Canciller ruso aclaró que sus conversaciones con el Enviado Especial de la ONU para Siria están abocadas a buscar nuevas fórmulas para detener la violencia y el baño de sangre en Siria y poner en marcha un diálogo, lamentando al mismo tiempo que se hiciera oídos sordos a los esfuerzos desplegados por Brahimi para establecer una tregua durante los días de Eid al-Adha (Fiesta del Sacrificio).
Lavrov recalcó la necesidad de contar con la aprobación del Gobierno sirio sobre cualquiera decisión respecto a enviar observadores o fuerzas de mantenimiento de paz a Siria, aseverando que esta decisión podría ser tomada solo por el Consejo de Seguridad y después de obtener el visto bueno del Gobierno sirio.
Asimismo, el titular de la diplomacia rusa hizo hincapié en la importancia de que la comunidad internacional respalde el diálogo entre el Gobierno sirio y la oposición para garantizar su éxito, aludiendo que ciertos bandos habían obstaculizado la misión de los observadores internacionales en Siria y que estos mismos están ahora obstruyendo el proceso de diálogo y paz en ese país.
Lavrov destacó que su país pedirá restaurar la misión de observadores internacionales en Siria y determinará su número; también estimó necesario enviar una delegación de investigación de la ONU a Siria, aclarando que esto sería posible solo en caso de alcanzar un alto el fuego.
El Canciller ruso expresó su esperanza de que Occidente sepa que no se conseguirá nada sin el diálogo con el Gobierno sirio, exhortando al mismo tiempo ¨a todas las potencias exteriores a asumir sus responsabilidades, en particular ante [la actitud de] las partes que apoyan en Siria¨.
Lavrov reiteró que la cuestión imperiosa en este periodo es obligar a todos los bandos sirios en conflicto a atenerse al alto el fuego y sentarse a la mesa de diálogo, manifestando que esto formó parte de sus conversaciones con Brahimi.
Lavrov lamentó no ratificar el acuerdo de Ginebra en el Consejo de Seguridad Internacional, pese a que recibiera la bendición de todos los actores internacionales. ¨la importancia de este acuerdo reside en contener la violencia de inmediato y luego iniciar un diálogo entre el Gobierno y la oposición para formar organismos que tengan la aptitud de dirigir el Estado en la etapa de transición¨ añadió. Lavrov afirmó su apoyo a los esfuerzos de Brahimi para dar con una solución unánime a la crisis en Siria.
Por su parte, el Enviado Especial de la ONU a Siria afirmó que las explosiones perpetradas por algunos grupos en los barrios residenciales se clasifican como ¨actos terroristas cuyos autores son grupos que no hemos tenido ningún contacto con ellos¨, aseverando que estos actos han sido ¨seguramente condenados por el Consejo de Seguridad y el Secretario General de la ONU y por todos los actores internacionales¨.
Brahimi aclaró que el Gobierno sirio anunció que se comprometerá con el alto el fuego durante los días de la Fiesta junto a pocos grupos de la oposición, por ello se acusa a otros bandos de violar la tregua.
Por otro lado, Brahimi negó que la ONU estuviera estudiando el envío de fuerzas a Siria, explicando que el Secretario General de la ONU había aclarado este asunto hace pocos días¨. Asimismo afirmó que no hay planes para enviar una misión de mantenimiento de la paz a Siria.
Brahimi advirtió que la situación en Siria va de mal en peor, puntualizando que la comunidad internacional debe laborar conjuntamente para ayudar a los sirios a alcanzar una solución a su crisis.
Brahimi destacó que Siria es un país muy importante y el pueblo sirio merece ser apoyado, añadiendo que él seguirá laborando con todos los bandos dentro y fuera de Siria para reducir la violencia y allanar el camino a un diálogo por construir la Nueva Siria, indicando que el cambio anhelado en Siria es un cambio real que sea concretado en el curso de un proceso guiado por los propios sirios y con el apoyo de la comunidad internacional.