Internacional
Nuevo estallido de violencia contra la etnia musulmana “rohingya”
56 muertos por violencia comunitaria en el oeste de Birmania
Al menos 56 personas murieron en los enfrentamientos de esta semana entre miembros de la etnia budista rakhine y musulmanes rohingyas en el oeste de Birmania, indicó el viernes un responsable del gobierno local.
"25 hombres y 31 mujeres murieron en cuatro comunas", indicó Win Myaing, portavoz del gobierno del Estado de Rakhine, precisando que unas 2.000 viviendas fueron incendiadas.
Tras unas semanas de aparente tranquilidad, la violencia entre budistas de la etnia rakhine y rohingyas, una minoría musulmana apátrida considerada por la ONU como una de las más perseguidas en el mundo, volvieron a estallar el domingo en varias comunas del Estado de Rakhine.
Desde que comenzaron los enfrentamientos en junio 150 personas murieron, según las cifras oficiales que muchas organizaciones estiman por debajo de la realidad.
Al menos 75.000 personas, en su gran mayoría rohingyas, fueron desplazados en la primera ola de violencia. Los últimos días son miles los que llegan cada día a pie o en barco hacia los campamentos en los alrededores de Sittwe, capital del Estado de Rakhine. Los campamentos están sobrepoblados y faltan alimentos así como cuidados médicos para los desplazados.
Esta nueva ola de violencia provocó la inquietud de la ONU y Estados Unidos reclamó el cese inmediato de los ataques.
Unos 800.000 rohingyas viven confinados en el Estado de Rakhine. Hablan un dialecto similar al que se utiliza en la vecina Bangladesh.
No forman parte de grupos étnicos reconocidos por el régimen de Naypyidaw, ni por muchos birmanos que los consideran la mayoría de las veces como inmigrantes bangladesíes ilegales y no esconden su hostilidad hacia ellos.
A mediados de julio el presidente birmano Thein Sein estimó que el único futuro para ellos era reagruparse en campamentos de refugiados o la expulsión del país, según su página internet oficial.
Bangladesh, que en junio frenó varios barcos de refugiados rohingyas, anunció por su lado que reforzará sus patrullas fronterizas para impedir la llegada de más barcos.