Presidente Iraní: El orden mundial es imperante y causa problemas globales

El presidente de la República Islámica de Irán, Mahmoud Ahmadineyad, ha acogido con beneplácito cualquier esfuerzo para establecer la paz y la estabilidad en el mundo.

Ahmadineyad, durante su octava intervención ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), celebrada en Nueva York, EE.UU., ha declarado este miércoles que el ente internacional está en declive y necesita una reforma estructural. 

Además, ha levantado la voz para denunciar que el Consejo de Seguridad de la ONU está bajo el control de ciertos Gobiernos y no representa los intereses de todos los países y naciones del planeta. 

Hoy en día, todos los países están descontentos con el orden mundial imperante, y la equívoca administración del mundo está causando problemas globales, ha señalado el jefe del Ejecutivo iraní.

Más adelante, ha añadido que la actual situación del mundo proviene del egoísmo y el odio, y es resultado de una administración errónea. En otra parte de sus declaraciones, Ahmadineyad se ha referido al poder de veto en la ONU, y lo ha calificado de obstáculo para la defensa de los derechos de las naciones.

El mandatario iraní ha criticado a ciertas potencias por presumir de ser defensoras de la libertad y cerrar los ojos ante la profanación a santidades religiosas y a profetas divinos, y ha recalcado que la falta de críticas a las políticas expansionistas y los movimientos del sionismo mundial impiden a los medios de comunicación internacional actuar de manera independiente. 

La declaración del presidente iraní, Mahmoud Ahmadineyad, fueron pronunciadas días después de que se emitiera una película anteislámica que satiriza al Profeta Mohamad (P). El largometraje dirigido por un israelí-estadounidense levantó fuertes protestas en todo el mundo, especialmente, entre la comunidad musulmana. 

Posteriormente, la revista francesa “Charlie Hebdo” publicó unas caricaturas del Profeta del Islam (P), las cuales exacerbaron aún más la ira que ya se había encendido en el mundo islámico por la emisión del filme sacrílego.