Internacional
Obama: Egipto no es amigo de EE.UU., pero tampoco es enemigo
Las declaraciones se producen tras el ataque de los manifestantes egipcios contra la embajada estadounidense en El Cairo
Tras los disturbios en la capital egipcia frente a la embajada de EE.UU. y el ataque al edificio diplomático, Washington dice que no considerará a El Cairo su aliado, pero tampoco lo agregará a la lista de adversarios.
Así lo declaró el presidente de EE.UU., Barack Obama. “No creo que podamos considerarlos [a los egipcios] nuestros aliados, pero tampoco los calificamos de enemigos”, dijo el mandatario estadounidense a la cadena MSNBC. No obstante, el presidente precisó que “tenemos que ver cómo van a reaccionar al incidente”. “Por supuesto lo que en esta situación podemos esperar es una respuesta a nuestras exigencias sobre la responsabilidad por la defensa de la embajada y su personal.
Si muestran que no asumen esta responsabilidad -así hacen todos los países que no tienen nuestra embajada en su territorio-, esto será un gran problema”, agregó el presidente. El presidente de Egipto, Mohamed Mursi, declaró que apoya la protesta pacífica, pero aseveró que rechaza los "ataques contra personas, embajadas y otros lugares".
Las fuerzas de seguridad de Egipto se vieron obligadas a disparar al aire y usar gases lacrimógenos contra los manifestantes que empezaron a lanzar piedras contra la embajada estadounidense en El Cairo.
Libia también reaccionó al lanzamiento de la película escandalosa con lanzagranadas y quemando el edificio del consulado de EE.UU. en Bengazi, acto que dejó sin vida al embajador estadounidense en la ciudad y a varios funcionarios de la misión diplomática.
También tuvieron lugar acciones de protesta a gran escala contra la película en Sudán, Marruecos, Túnez y Palestina, donde la muchedumbre enfurecida quemó la bandera estadounidense cerca del edificio de la ONU en Gaza.
| Tras los disturbios en la capital egipcia frente a la embajada de EE.UU. y el ataque al edificio diplomático, Washington dice que no considerará a El Cairo su aliado, pero tampoco lo agregará a la lista de adversarios.
Así lo declaró el presidente de EE.UU., Barack Obama. “No creo que podamos considerarlos [a los egipcios] nuestros aliados, pero tampoco los calificamos de enemigos”, dijo el mandatario estadounidense a la cadena MSNBC. No obstante, el presidente precisó que “tenemos que ver cómo van a reaccionar al incidente”. “Por supuesto lo que en esta situación podemos esperar es una respuesta a nuestras exigencias sobre la responsabilidad por la defensa de la embajada y su personal.
Si muestran que no asumen esta responsabilidad -así hacen todos los países que no tienen nuestra embajada en su territorio-, esto será un gran problema”, agregó el presidente. El presidente de Egipto, Mohamed Mursi, declaró que apoya la protesta pacífica, pero aseveró que rechaza los "ataques contra personas, embajadas y otros lugares".
Las fuerzas de seguridad de Egipto se vieron obligadas a disparar al aire y usar gases lacrimógenos contra los manifestantes que empezaron a lanzar piedras contra la embajada estadounidense en El Cairo.
Libia también reaccionó al lanzamiento de la película escandalosa con lanzagranadas y quemando el edificio del consulado de EE.UU. en Bengazi, acto que dejó sin vida al embajador estadounidense en la ciudad y a varios funcionarios de la misión diplomática.
También tuvieron lugar acciones de protesta a gran escala contra la película en Sudán, Marruecos, Túnez y Palestina, donde la muchedumbre enfurecida quemó la bandera estadounidense cerca del edificio de la ONU en Gaza.