La calma domina en los barrios que presentaron los últimos choques armados, tras una noche de violentas enfrentamientos donde se emplearon todo tipo de armas automáticas y lanzagranadas, lo que causó varios incendios en locales comerciales y viviendas.


Una calma que parece más bien el descanso del guerrero, según la descripción de fuentes observadoras, ya que consideran que los “guerrilleros” están tomando un rato de descanso después de las largas horas de combates durante la noche.

En declaración para “Alintiqad”, las fuentes dicen que “se nota que en esta ronda (número 12), el número de combatientes participantes ha disminuido notablemente”.


De otra parte, durante ese tiempo, las calles de la ciudad fue testigo de una presencia inhabitual de hombres armados, algunos de ellos manifestaron que “debido a la ausencia de las fuerzas del orden, estamos obligados a defender nuestros negocios de los robos y los saqueos, ya que dentro de la ciudad circulan coches con hombres armados dentro que aterrorizan la gente y disparan hacia las concentraciones”.

De otro lado, el ejército libanés se vio obligado a reducir sus efectivos y desalojar algunos puntos en calle “Siria” que separa los dos barrios en conflicto, tras haber sido tiroteados.

Los choques armados han causado ya siete muertos y 70 heridos, según informaron hoy fuentes policiales. El Ejército confirmó que entre los heridos hay nueve militares, entre ellos un lugarteniente, y añadió que un proyectil cayó cerca de uno de sus vehículos en la calle Siria.


La Agencia Nacional de Noticias dijo que algunos habitantes están bloqueados en sus casas, mientras que las televisiones locales mostraron varias viviendas ardiendo y coches dañados en ambos barrios.