Dimite la presidenta de la Universidad de Columbia a raíz de su respuesta a las protestas

La presidenta de la Universidad de Columbia, Nemat Shafik, dimitió este jueves de su cargo, a raíz de su conducta ante las protestas estudiantiles que estallaron en abril en ese campus universitario en Nueva York, Estados Unidos, en apoyo a Palestina ocupada.

Según confirmó un comunicado de la institución, Shafik ocupó el cargo por apenas un año, y fue expuesta durante los últimos meses a críticas generalizadas dentro y fuera de esa sede académica por su inadecuada respuesta a las manifestaciones estudiantiles para denunciar el genocidio israelí en la Franja de Gaza.

Ante el movimiento en el campus, la presidenta convocó a la policía de Nueva York para dispersar a los estudiantes, lo cual provocó la ira de los profesores y el resto del personal, pues los uniformados arrestaron a un gran número de jóvenes y utilizaron la violencia contra ellos.

La académica asumió sus funciones en Columbia en julio de 2023, y el 9 de octubre (dos días después del inicio de la epopeya Diluvio de Al-Aqsa), emitió un comunicado en el cual expresaba su apoyo a la entidad sionista y condenó la acción de la Resistencia palestina contra el ejército israelí.

En noviembre, la universidad suspendió el trabajo de los grupos Estudiantes por la Justicia en Palestina (SJP) y Voz Judía por la Paz (JVP), según ella porque organizaban “protestas no autorizadas”.

Posteriormente, en marzo pasado, la Unión de Libertades Civiles de Nueva York (NYCLU) y el Grupo de Acción Legal Palestina presentaron una demanda contra la universidad por los ataques y castigos a los dos grupos de estudiantes durante las protestas.

En protesta contra la decisión de arrestar a estudiantes, cientos de profesores de Columbia organizaron una huelga colectiva.

Todo esto fue seguido por una expansión del alcance de las protestas estudiantiles en apoyo de Palestina, para incluir otras universidades en todo Estados Unidos, que también fueron respondidas con violencia por parte de la policía.

Con su renuncia, Shafik se convierte en el tercer presidente de una universidad que forma parte de la llamada Ivy League que dimite tras las protestas relacionadas con la guerra en Gaza, y quienes fueron llamadas a testificar ante el Congreso estadounidense.