El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, rompió el viernes una semana de silencio absoluto que mantenía desde que volvió de su tratamiento contra el cáncer en Cuba, con una llamada telefónica a la televisión estatal en la que dijo que iba a abandonar su estilo desbocado para descansar y recuperar su salud.

Chávez comentó que pasó la semana "encerrado" bajo observación médica, tras haber terminado el tratamiento de radioterapia al que se sometió en La Habana y aseguró que confía en recuperarse progresivamente.

"Yo lamentablemente no seguiré siendo el caballo desbocado. Descansaré y recuperaré mi salud", dijo el mandatario, quien inició el diálogo animado y cantó desde el hilo telefónico con un grupo de música folclórica.

"Le pido a Dios todos los días que me permita terminar de cumplir la misión que el pueblo me ha dado", aseguró tras dar cuenta de una serie de recursos y proyectos aprobados en los últimos días.

Una fuente cercana a su equipo médico dijo a Reuters que Chávez tiene una dolencia en una pierna, producto de la enfermedad, lo que dificulta sus apariciones públicas.

Chávez, usualmente locuaz y de presencia frecuente en la vida cotidiana de los venezolanos, ha ido espaciando sus apariciones públicas este año, lo que ha desatado especulaciones de que su salud se ha deteriorado a tal punto de que podría complicar su participación en los comicios de octubre.

El gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), insiste en que Chávez se recupera, negando insistentemente que esté buscando otro candidato.