Internacional
Túnez: Los medios de comunicación y el poder judicial
Batallas pendientes para completar los objetivos de la revolución
Túnez – Rawaa Kassem
Los ataques del Presidente de la República Mounssef Marzouki contra los medios de comunicación durante su reciente visita a Qatar en el marco de una gira en el Golfo, han provocado un gran resentimiento entre los grandes segmentos de los tunecinos, especialmente que coincidió con una campaña de intensificación ejercida por el gobierno y algunos partidarios del movimiento del renacimiento gobernador sobre los medios de comunicación tunecinos, acusándolos de estar del color violeta, el color preferido por Zein El Abidine Ben Ali.
El presidente Marzouqi acusó, en una entrevista con uno de los periódicos del Golfo, a los medios de comunicación de Túnez diciendo que son medios de "falsificar los hechos", lo que desató una ola de descontento en este sector, considerando que es impropio que el jefe de Estado critique a los medios de su propio país en otro país, y que esto es un asunto interno que no se suponía discutirlo durante la gira en el Golfo.
Los medios de la vergüenza
Los partidarios del movimiento renacentista gobernante han protestado por semanas delante de la televisión tunecina exigiendo la limpieza del sector de los medios "de los partidarios del antiguo régimen" según sus propias palabras. Para estos, los medios de comunicación de Túnez no mantienen el ritmo de la revolución en el país y no reflejan la opinión de la mayoría, sino están dirigidos por una minoría de izquierdas que tienen como objetivo interrumpir el gobierno y el movimiento de Renacimiento. Levantando la consigna de "limpiar los medios de la vergüenza".
Muchos de los representantes de los medios que levantan hoy en día la consigna de libertad de expresión y la necesidad de independencia de su sector eran, según los manifestantes que se encontraban en frente de la televisión, en la época de la tiranía partidarios de Zein El Abidine Ben Ali y de su régimen, y los comercializados de sus políticas, es una pena que sigan en sus puestos. El gobierno quiere la salida de estos o la venta de los medios de comunicación públicos al sector privado, en un movimiento que ha sido considerada por más de un observador como un castigo por los medios de comunicación que no participan todavía en el proyecto del Renacimiento.
Una palabra correcta
Los trabajadores de la televisión nacional afirman que su sector no es el único que tiene que ser limpiado, todos los sectores del país necesitan ser limpiados de estos que han participado en actos de corrupción con el antiguo régimen, incluido el gobierno, que ha utilizado algunos cuadros de la RCD disuelto en sensibles lugares.
Algunos periodistas, incluidos los miembros del sindicato nacional de los periodistas, afirman que el gobierno no se toma en serio la limpieza del sector de los medios, y la prueba de ello, es que no quiere soltar los archivos de la policía política para conocer a los periodistas que participaron en delatar y presentar informes contra sus colegas en la época de Ben Ali, porque entre estos encontramos simpatizantes del Movimiento del Renacimiento y algunas personas con las cuales han hecho tratos con ellos a lo largo y ancho, algunos eran partidarios de Ben Ali y su esposa, hoy se han convertido en aliados del movimiento del Renacimiento y defensores de las políticas del gobierno. En consecuencia, amplios sectores de la oposición consideran que la presión hecha por el gobierno sobre los medios de comunicación tiene por objeto someter a estos y transferirlos de color de violeta al azul, es decir el color del movimiento del Renacimiento.
Cancelación de la sentada
Cabe señalar que algunos actos de violencia se produjeron frente a la televisión tunecina entre algunos partidarios del gobierno y los trabajadores de la organización después de que uno de los manifestantes atacó a un trabajador en la televisión Nacional. También algunos de los manifestantes han tratado de entrar en la televisión, pero los empleados les han impedido. Lo que condujo a enfrentamientos e insultos, e impone la intervención de las fuerzas de seguridad y el ejército y el Ministerio Público, que resolvió el asunto e impuso la anulación de la sentada que duró durante semanas.
Algunos opositores al gobierno ven que el grupo de Jabalí se envolvió en batalla con los medios de comunicación y con la Unión General de trabajo tunecino, la oposición y algunos abogados en el marco de la cuestión llamada la causa de los Abogados, y se olvidó de las cuestiones claves para los cuales ha sido elegido por el pueblo y que son la creación de puestos de trabajo y el desarrollo en las regiones del interior del país que no han recibido su parte del desarrollo durante las etapas anteriores que siguieron a la independencia del país. Las demandas sociales es la prioridad, y responder a las acusaciones de la oposición y no se van a trabajar para el beneficio del país y la gente no es el hábito de los principales partidos que tienen programas capaces de gobernar y actuar en el movimiento de la historia.
La independencia de la Justicia
Algunas voces se levantaban para acusar al Gobierno del retardo con respecto a construir la independencia del poder judicial. El presidente del Consejo General del Poder Judicial fue según la Constitución antigua el Presidente de la República, y el Ministerio Público estaba plenamente sujeto al Ministro de Justicia. No había separación entre el poder ejecutivo y el poder judicial en Túnez, y los jueces tenían miedo por los ascensos y las condiciones de trabajo, el juez que no se implicaba en el proyecto de Bin Ali se ve privado de los ascensos y transferido en los tribunales los más lejos del país y alejado de su familia.
Nada ha cambiado después de la revolución, aunque el decreto emitido por el ex presidente durante el período intermedio, Fouad Mebazaa, el cual fue diseñado para promover la independencia del poder judicial, a pesar de las deficiencias contenidas, no se activa. El poder judicial que estaba sujeto a Ben Alí es hoy sujeto al movimiento del Renacimiento, y la prueba es cuando el procesamiento se precipitó a emitir dos tarjetas de llevar y depositar en la prisión por el director de un diario que ha publicado en su portada imágenes consideradas indecentes. Por lo tanto no hay transición democrática en Túnez, en ausencia de un poder judicial independiente y medios de comunicación libres, y todo lo que pasó es una elección libre que no es suficiente para la transición a la democracia.
Huelga
Los jueces de Túnez han entrado en una huelga en protesta contra la desaceleración del gobierno en el proceso de limpieza del Poder Judicial de los jueces corruptos, por un lado y dedicar efectivamente la independencia judicial, a través de la elección de un consejo supremo de la Justicia para los jueces, este consejo debe ser independiente del poder ejecutivo y sin ninguna autoridad de parte del Ministro de Justicia, el presidente del gobierno, y el de la República.
Muchos jueces en Túnez temen que el gobierno actual continúa con el enfoque de Ben Ali a dominar el poder judicial y hacerlo el servidor de sus políticas y utilizarlo contra los opositores como lo hizo el antiguo régimen. Por lo tanto consideran que la batalla ya ha comenzado para completar los objetivos de la revolución de Túnez, que aún están en curso en más de un sector, los objetivos de la revolución no serán alcanzados sin un poder judicial independiente, porque la justicia es la base de la construcción como decía el fundador de la sociología Ibn Galdón, que nació en la capital tunecina.
| Túnez – Rawaa Kassem
Los ataques del Presidente de la República Mounssef Marzouki contra los medios de comunicación durante su reciente visita a Qatar en el marco de una gira en el Golfo, han provocado un gran resentimiento entre los grandes segmentos de los tunecinos, especialmente que coincidió con una campaña de intensificación ejercida por el gobierno y algunos partidarios del movimiento del renacimiento gobernador sobre los medios de comunicación tunecinos, acusándolos de estar del color violeta, el color preferido por Zein El Abidine Ben Ali.
El presidente Marzouqi acusó, en una entrevista con uno de los periódicos del Golfo, a los medios de comunicación de Túnez diciendo que son medios de "falsificar los hechos", lo que desató una ola de descontento en este sector, considerando que es impropio que el jefe de Estado critique a los medios de su propio país en otro país, y que esto es un asunto interno que no se suponía discutirlo durante la gira en el Golfo.
Los medios de la vergüenza
Los partidarios del movimiento renacentista gobernante han protestado por semanas delante de la televisión tunecina exigiendo la limpieza del sector de los medios "de los partidarios del antiguo régimen" según sus propias palabras. Para estos, los medios de comunicación de Túnez no mantienen el ritmo de la revolución en el país y no reflejan la opinión de la mayoría, sino están dirigidos por una minoría de izquierdas que tienen como objetivo interrumpir el gobierno y el movimiento de Renacimiento. Levantando la consigna de "limpiar los medios de la vergüenza".
Muchos de los representantes de los medios que levantan hoy en día la consigna de libertad de expresión y la necesidad de independencia de su sector eran, según los manifestantes que se encontraban en frente de la televisión, en la época de la tiranía partidarios de Zein El Abidine Ben Ali y de su régimen, y los comercializados de sus políticas, es una pena que sigan en sus puestos. El gobierno quiere la salida de estos o la venta de los medios de comunicación públicos al sector privado, en un movimiento que ha sido considerada por más de un observador como un castigo por los medios de comunicación que no participan todavía en el proyecto del Renacimiento.
Una palabra correcta
Los trabajadores de la televisión nacional afirman que su sector no es el único que tiene que ser limpiado, todos los sectores del país necesitan ser limpiados de estos que han participado en actos de corrupción con el antiguo régimen, incluido el gobierno, que ha utilizado algunos cuadros de la RCD disuelto en sensibles lugares.
Algunos periodistas, incluidos los miembros del sindicato nacional de los periodistas, afirman que el gobierno no se toma en serio la limpieza del sector de los medios, y la prueba de ello, es que no quiere soltar los archivos de la policía política para conocer a los periodistas que participaron en delatar y presentar informes contra sus colegas en la época de Ben Ali, porque entre estos encontramos simpatizantes del Movimiento del Renacimiento y algunas personas con las cuales han hecho tratos con ellos a lo largo y ancho, algunos eran partidarios de Ben Ali y su esposa, hoy se han convertido en aliados del movimiento del Renacimiento y defensores de las políticas del gobierno. En consecuencia, amplios sectores de la oposición consideran que la presión hecha por el gobierno sobre los medios de comunicación tiene por objeto someter a estos y transferirlos de color de violeta al azul, es decir el color del movimiento del Renacimiento.
Cancelación de la sentada
Cabe señalar que algunos actos de violencia se produjeron frente a la televisión tunecina entre algunos partidarios del gobierno y los trabajadores de la organización después de que uno de los manifestantes atacó a un trabajador en la televisión Nacional. También algunos de los manifestantes han tratado de entrar en la televisión, pero los empleados les han impedido. Lo que condujo a enfrentamientos e insultos, e impone la intervención de las fuerzas de seguridad y el ejército y el Ministerio Público, que resolvió el asunto e impuso la anulación de la sentada que duró durante semanas.
Algunos opositores al gobierno ven que el grupo de Jabalí se envolvió en batalla con los medios de comunicación y con la Unión General de trabajo tunecino, la oposición y algunos abogados en el marco de la cuestión llamada la causa de los Abogados, y se olvidó de las cuestiones claves para los cuales ha sido elegido por el pueblo y que son la creación de puestos de trabajo y el desarrollo en las regiones del interior del país que no han recibido su parte del desarrollo durante las etapas anteriores que siguieron a la independencia del país. Las demandas sociales es la prioridad, y responder a las acusaciones de la oposición y no se van a trabajar para el beneficio del país y la gente no es el hábito de los principales partidos que tienen programas capaces de gobernar y actuar en el movimiento de la historia.
La independencia de la Justicia
Algunas voces se levantaban para acusar al Gobierno del retardo con respecto a construir la independencia del poder judicial. El presidente del Consejo General del Poder Judicial fue según la Constitución antigua el Presidente de la República, y el Ministerio Público estaba plenamente sujeto al Ministro de Justicia. No había separación entre el poder ejecutivo y el poder judicial en Túnez, y los jueces tenían miedo por los ascensos y las condiciones de trabajo, el juez que no se implicaba en el proyecto de Bin Ali se ve privado de los ascensos y transferido en los tribunales los más lejos del país y alejado de su familia.
Nada ha cambiado después de la revolución, aunque el decreto emitido por el ex presidente durante el período intermedio, Fouad Mebazaa, el cual fue diseñado para promover la independencia del poder judicial, a pesar de las deficiencias contenidas, no se activa. El poder judicial que estaba sujeto a Ben Alí es hoy sujeto al movimiento del Renacimiento, y la prueba es cuando el procesamiento se precipitó a emitir dos tarjetas de llevar y depositar en la prisión por el director de un diario que ha publicado en su portada imágenes consideradas indecentes. Por lo tanto no hay transición democrática en Túnez, en ausencia de un poder judicial independiente y medios de comunicación libres, y todo lo que pasó es una elección libre que no es suficiente para la transición a la democracia.
Huelga
Los jueces de Túnez han entrado en una huelga en protesta contra la desaceleración del gobierno en el proceso de limpieza del Poder Judicial de los jueces corruptos, por un lado y dedicar efectivamente la independencia judicial, a través de la elección de un consejo supremo de la Justicia para los jueces, este consejo debe ser independiente del poder ejecutivo y sin ninguna autoridad de parte del Ministro de Justicia, el presidente del gobierno, y el de la República.
Muchos jueces en Túnez temen que el gobierno actual continúa con el enfoque de Ben Ali a dominar el poder judicial y hacerlo el servidor de sus políticas y utilizarlo contra los opositores como lo hizo el antiguo régimen. Por lo tanto consideran que la batalla ya ha comenzado para completar los objetivos de la revolución de Túnez, que aún están en curso en más de un sector, los objetivos de la revolución no serán alcanzados sin un poder judicial independiente, porque la justicia es la base de la construcción como decía el fundador de la sociología Ibn Galdón, que nació en la capital tunecina.