Boris Johnson se disculpa pero rehúsa dimitir, tras ser multado por fiesta durante el confinamiento

Este martes, la policía londinense anunció haber notificado más de 50 multas por Scotland Yard por violar las reglas del confinamiento en la investigación del “Partygate”. Y Boris Johnson, su esposa Carrie y el secretario del Tesoro Rishi Sunak figuran entre los sancionados.

El líder de la oposición, el laborista Keir Starmer, pidió inmediatamente la dimisión del número uno y número dos del ejecutivo: “Boris Johnson y Rishi Sunak infringieron la ley y mintieron repetidamente a los ciudadanos británicos”, tuiteó.

Scotland Yard investigó al menos doce fiestas y celebraciones en la mansión del primer ministro, incluida la de su cumpleaños.

Boris Johnson pidió el martes “disculpas completas”, pero rehusó dimitir, tras convertirse en el primer jefe de gobierno en ejercicio multado por infringir la ley.

“He pagado la multa y pido disculpas completas”, afirmó, asegurando “entender la ira” de los británicos, privados en aquella época de reunirse con sus seres queridos, y “aceptar con toda sinceridad que la gente tiene derecho a esperar algo mejor”.

Pero a la pregunta de si pensaba dimitir declaró: “Quiero seguir adelante y cumplir el mandato de hacer frente a los problemas que enfrenta el país”.

Tras haber negado inicialmente que hubiese habido fiestas en los locales donde vive y trabaja, el primer ministro reconoció después haber participado el 20 de mayo de 2020, durante el primer confinamiento, en un evento en los jardines de Downing Street. Pero aseguró creer que se trataba de un “evento laboral”, provocando sorna e indignación.