Reino Unido reta a China y envía una fragata al estrecho de Taiwán

En una medida provocadora hacia China, el Reino Unido ha desplegado una fragata en las aguas del estrecho de Taiwán, donde navegan normalmente navíos de EEUU.

“Después de trabajar con nuestros aliados y socios en el mar de la China Oriental, pasamos ahora por el estrecho de Taiwán rumbo a Vietnam para visitar a la Armada Popular vietnamita”, ha anunciado la fragata en un mensaje emitido en la red social Twitter.

Al preguntar los periodistas al ministro de Defensa de Taiwán, Chiu Keo Cheng, sobre el tema,el titular taiwanés se ha negado a dar más detalles sobre el buque británico aduciendo que no sabe qué misiones llevan a cabo los barcos extranjeros en el estrecho.

“Cuando pasen por el estrecho de Taiwán, el Ejército de nuestra nación comprenderá la situación, pero no interferirá”, ha manifestado, aseverando que vigilan todos los movimientos cerca de Taiwán.

Se trata de la fragata británica HMS Richmond que está desplegada en la zona con el fin de reforzar vínculos militares y políticos con sus socios de la región como Japón, Corea del Sur, Singapur y La India.

No obstante, su paso por el estrecho de Taiwán es algo inusual en buques de guerra europeos, ya que normalmente los buques estadounidenses atraviesan esas aguas en sus maniobras por el Pacífico.

El Reino Unido es otro país europeo que ha aumentado su presencia en la región del Indo-Pacífico mientras China rechaza la presencia militar de potencias como Estados Unidos y Europa en sus aguas sureñas, y acusa a Washington de tratar de dominar este mar y militarizar la zona.

De hecho, las autoridades chinas se oponen “firmemente” a la “práctica de flexionar músculos” en torno a su país, y alertan que estas acciones socavan la soberanía y la seguridad del gigante asiático y sabotean la paz y la estabilidad regionales.

En concreto, el asunto de Taiwán ha llevado a los observadores a alertar del estallido de una guerra, a medida que Estados Unidos fortalece su presencia militar en aguas próximas a China y refuerza la ayuda militar a Taipéi, así como los contactos diplomáticos con la isla, que Pekín considera parte de su soberanía.