El asesino noruego Anders Behring Breivik declaró hoy el lunes frente una audiencia en el tribunal que mantenerlo detenido aislado era una tortura, después de que un juez ordenara que permaneciera aislado durante otras cuatro semanas. Breivik, quien admitió matar a 77 personas el 22 de julio, ha sido mantenido aislado durante dos meses.

Según la ley noruega, el confinamiento solitario sólo puede ser impuesto durante cuatro semanas por vez, pero la fiscalía general podría añadir cuatro semanas más cuando vence el plazo.

La jueza declaró que el aislamiento fue necesario para impedirle a Breivik de comunicar con los menos posibles de cómplices porque está bajo investigación hasta este momento. La jueza dijo que Breivik había repetido una declaración previa sobre que consideraba su aislamiento como una "forma de tortura".

El abogado de Breivik, Geir Lippestad, dijo a periodistas que Breivik pidió declarar una declaración frente la audiencia con las puertas cerradas y que no había mostrado ningún signo de arrepentimiento por sus hechos. Expertos legales esperan que Breivik siga en la prisión hasta el juicio, posiblemente en el 2012, aunque no es necesariamente el aislamiento hasta ese momento.

La policía estaba custodiando el tribunal con ametralladoras, subrayando la tensión que rodea a los procedimientos en un país donde ver a las fuerzas del orden armadas es algo raro y inusual.