Internacional
Crónica de una liberación
Esta liberación es un gesto que valoramos
Las FARC entregaron el lunes a los últimos 10 uniformados que tenía en su poder a una misión humanitaria, un gesto que el presidente Juan Manuel Santos consideró "muy importante" pero "no suficiente" para iniciar un proceso de paz con la guerrilla.
Los rebeldes entregaron a los seis policías y cuatro militares, que tuvieron prisioneros entre 12 y 14 años, a una misión del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y el grupo civil mediador Colombianos y Colombianas por la Paz, que los recogieron en un helicóptero del gobierno de Brasil en un pueblo sobre el río Guaviare (sureste).
Ya libres, los uniformados fueron recibidos en la pista del aeropuerto de Villavicencio (110 km al sur de Bogotá) por un equipo médico que les llevó a un salón privado donde se encontraron con sus familiares más cercanos.
Más tarde fueron trasladados a Bogotá para los exámenes médicos.
La entrega de los 10 últimos rehenes en una sola vez resultó sorpresiva ya que el operativo de rescate estaba previsto que se celebrara en dos jornadas, entre este lunes y el miércoles próximo.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, consideró que "esta liberación y sobre todo el compromiso de las FARC de no volver a secuestrar (a civiles) es un gesto que valoramos en toda su dimensión".
Recientemente, las FARC han planteado un diálogo directo al presidente Santos y anunciaron su renuncia al secuestro de civiles con fines de financiamiento.