Internacional
Washington Post: Servicio Secreto implicado en varios escándalos
Anuncian una purga entre altos cargos del cuerpo de seguridad del presidente
El periódico Washington Post ha informado este miércoles de inminentes cambios en la cúpula del Servicio Secreto, encargado de garantizar la seguridad del presidente.
El motivo son varios escándalos en los que el organismo se ha visto implicado durante los últimos meses.
En concreto, el Post, que cita fuentes confidenciales, habla del relevo de cuatro altos cargos. Se trata de los asistentes del director, encargados respectivamente de tareas de protección, tecnología, investigación y relaciones públicas. Un quinto miembro habría aceptado jubilarse.
Según el Post ha sido el propio director del Servicio Secreto, Joseph P. Clancy, el encargado de transmitir a sus subordinados, algunos de los más veteranos de la agencia, la necesidad de su marcha.
Clancy sustituyó al frente del Servicio Secreto a Julia Pierson, quien dimitió el pasado 14 de octubre tras las reiteradas fallas en la seguridad presidencial. Estas incluyen el asalto a la Casa Blanca de un individuo armado con un cuchillo, reducido antes de que pudiera ocasionar ningún daño. Pierson tampoco logró explicar cómo fue posible que un individuo armado y con antecedentes penales coincidiera en un ascensor con el presidente Obama.
Pierson, la primera mujer jamás designada para liderar el Servicio Secreto, llegó al cargo en marzo de 2013 con el mandato de mejorar la imagen de la agencia, después de que se descubriera que en abril de 2012 miembros del Servicio Secreto contrataron en Cartagena de Indias a varias prostitutas días antes de que el presidente llegase a la ciudad para participar en la VI Cumbre de las Américas.
| El periódico Washington Post ha informado este miércoles de inminentes cambios en la cúpula del Servicio Secreto, encargado de garantizar la seguridad del presidente.
El motivo son varios escándalos en los que el organismo se ha visto implicado durante los últimos meses.
En concreto, el Post, que cita fuentes confidenciales, habla del relevo de cuatro altos cargos. Se trata de los asistentes del director, encargados respectivamente de tareas de protección, tecnología, investigación y relaciones públicas. Un quinto miembro habría aceptado jubilarse.
Según el Post ha sido el propio director del Servicio Secreto, Joseph P. Clancy, el encargado de transmitir a sus subordinados, algunos de los más veteranos de la agencia, la necesidad de su marcha.
Clancy sustituyó al frente del Servicio Secreto a Julia Pierson, quien dimitió el pasado 14 de octubre tras las reiteradas fallas en la seguridad presidencial. Estas incluyen el asalto a la Casa Blanca de un individuo armado con un cuchillo, reducido antes de que pudiera ocasionar ningún daño. Pierson tampoco logró explicar cómo fue posible que un individuo armado y con antecedentes penales coincidiera en un ascensor con el presidente Obama.
Pierson, la primera mujer jamás designada para liderar el Servicio Secreto, llegó al cargo en marzo de 2013 con el mandato de mejorar la imagen de la agencia, después de que se descubriera que en abril de 2012 miembros del Servicio Secreto contrataron en Cartagena de Indias a varias prostitutas días antes de que el presidente llegase a la ciudad para participar en la VI Cumbre de las Américas.