Las varias acusaciones llevadas contra los partidarios de la Causa Palestina, y las que condenan los actos criminales sionistas, no impidieron al caricaturista brasileño, Carlos Latuff, de adoptar una política favorable para los dolores de los pueblos que sufren injusticias en el nivel mundial.

Carlos Latuff, nacido el 30 de noviembre de 1968 en Río de Janeiro, es un dibujante brasileño de caricaturas políticas. En el momento de su visita para Líbano, habló para "Alintiqad" desde el campo de los refugiados palestinos de Bourj Al-Barajne situado en el Dahiyeh, dónde hizo una pintura mural. “Soy un palestino de corazón”, dice: "no voy a vivir para siempre y morir para mis pensamientos no me preocupe". Respondiendo a una pregunta acerca de las amenazas que recibe, dijo Latuff: "éstas no valen nada, porque desde el día en que puse mis pies por la primera vez en la Ribera Occidental y he visto la forma en que los palestinos viven, pensé que la única opción que tengo es para sostenerlos". Según Carlos, los orígenes libanesas de su abuelo no están detrás de este soporte, pero se trata  de soportar los derechos de los pueblos", que sean palestinos o de otras nacionalidades. Del mismo modo, admite que su lucha por la Causa Palestina se ha convertido en "Muy Personal".



Sin embargo, este "dibujante palestino", como le gusta ser llamado, no acepta la comparación hecha entre él y el famoso caricaturista palestino, Naji Al-Ali, porque según él, es un dibujante que considera el hecho de ser pro palestino es "un deber" que cumple. Carlos fue "feliz y orgulloso" de su visita para el campo de Bourj Al-Barajne que representa para él una "buena oportunidad", sobre todo que ha sido prohibido visitar la Ocupada Palestina por las autoridades israelíes de ocupación, y encontrar a los palestinos a quienes dedica sus dibujos que contienen "sus posiciones”. Pronunciando estas declaraciones, la voz de almuecín aumentó apelando a la oración que consideró como "un signo" que confirma "la legitimidad de su posición".

Carlos Latuff que fue objeto de acusaciones de antisemitismo declaró al sitio electrónico Alintiqad "su oposición" “a la política de Israel y no a los Judíos”. Afirma que los sionistas que "no consiguieron impedir el acceso a sus dibujos, tratan de asociarlos con ciertas cuestiones como las del racismo y del odio”. Carlos Latuff ganó en 2006, ex aequo con la francesa Chard, el segundo premio del Concurso internacional de caricaturas sobre el Holocausto organizado en Teherán; esta vez la acusación fue "negacioncita del holocausto", Latuff desmiente el hecho de tener "negar el holocausto" y denuncia  el empleo de este acontecimiento para "cumplir una agenda y justificar los crímenes de “Israel” contra los palestinos y los Árabes". "Dibujé a un hombre palestino en traje de los campos de concentración delante de la pared de apartheid", pero esta "comparación simple es prohibida" por los sionistas.

“Prometí a los palestinos en Cisjordania que, llegando a Brasil, pondré mi arte en su servicio", afirma. "Mi objetivo no es ser famoso, y pues sus amenazas y acusaciones no me preocupan", persigue.

Es en una parte gracias a Twiter que el dibujante ha sido conocido por los activistas de Egipto al principio de la revolución. El dibujante brasileño jamás puso los pies en Egipto, pero sus imágenes se han convertido en el símbolo de la revolución egipcia en la Plaza del Tahrir. Al principio, Carlos hizo solamente cinco dibujos para los egipcios y cuando se dio cuenta que sus dibujos se habían transformado en herramienta de lucha contra el régimen, propuso continuar hasta la caída de Hosni Mubarak. Sobre los sitios de discusiones egipcias, los jóvenes se preguntaban si este caricaturista no era egipcio, y se divertían en darle sobrenombres egipcios y en decir que conocía “muy bien el juego”. Expresa su deseo para visitar este país en el cual " ya tiene muchos amigos a los que nunca ha visto", y lamenta que esto es imposible actualmente.

Comprometido en varias causas, el militante pro-palestino y anti-estadounidense tomó su lucha para la Palestina en un viaje a Cisjordania en 1999. “Dibujo para todas las reivindicaciones los reclamos que encuentro justo en cualquier lugar del planeta", ha argumentado en varias ocasiones. También Dibujó para la oposición en Bahréin, Yemen, Túnez y Libia.

Latuff ha concluido su visita para Líbano en el sur, y más precisamente en el sitio turístico de Mlita, que fue entre 1985 y 2000, una base desde la cual la Resistencia de Hezbolá lanzó, operaciones para liberar a sus tierras contra el ejército sionista que ocupó las colinas cercanas durante mas de veinte dos años y siguen.