Las maniobras más grandes de la República islámica de Irán, denominadas “Mohamed, el profeta de Dios”, concluyeron con un desfile militar marítimo al norte del estrecho de Hermuz. El presidente Hassan Ruhani presenció junto a los altos mandos militares la formación a bordo de la fragata “yamaran”.


Ruhani afirmó, en un discurso, que la República Islámica, junto a los países de la región, son capaces de conservar la seguridad y la estabilidad en la región sin la intervención de fuerzas extranjeras.

Ruhani expresó satisfacción al ver que “después de 35 años de un injusto cerco contra Irán, las fuerzas iraníes, sobre todo las navales, consiguieron llegar a ser una potencia militar defensiva que pueda con toda seguridad proteger la paz y la estabilidad en el país”.


“Estos ejercicios militares dan más confianza al pueblo iraní y a los amigos de Irán por la presencia de la fuerza naval en el Golfo Persico y su disposición a enfrentarse con la piratería marítima”, agregó.