Internacional
La ocupación israelí toma venganza por el ataque a una sinagoga
Encarcelar a familiares de atacantes y demolición de viviendas
La policía de ocupación israelí detuvo a una docena de familiares de los dos palestinos que atacaron a una sinagoga en la ciudad santa de Al-Quds.
Los atacantes, muertos a balazos en la escena de los hechos, fueron identificados como Ghassan Abu Yamal y su primo Uday y un portavoz del Frente Popular para la Liberación de Palestina dijo que eran miembros de esa agrupación.
Poco después de conocerse el ataque, contingentes policiales israelíes allanaron las viviendas de ambos hombres en el distrito de Yabal al Mukabir y detuvieron a la esposa de Ghassan, su madre y sus hermanos, así como a un hermano de Uday.
Residentes en la zona organizaron una protesta contra el allanamiento y los arrestos. La policía sionista respondió con disparos de granadas lacrimógenas; por lo menos 17 fueron internados con síntomas de asfixia.
Tras los choques con los residentes las fuerzas ocupantes cortaron con bloques el acceso al distrito, sometido a un virtual estado de sitio.
Abbas condena ataque e insta a fin de provocaciones israelíes
De su parte , el presidente palestino, Mahmoud Abbas, condenó el ataque contra la sinagoga y los actos violentos, quienquiera que los realicen y demandó el fin de las incursiones dentro de la mezquita Al Aqsa, las provocaciones y la incitación de algunos ministros israelíes.
El ataque a la sinagoga era el más violento desde el inicio semanas atrás de violaciones de Al Aqsa, uno de los lugares más santos del Islam, por judíos extremistas que demandan su demolición para construir un templo hebreo.
La escalada de violencia era sólo cuestión de tiempo después que la semana pasada el primer ministro israelí se comprometiera con el rey de Jordania y el secretario de estado norteamericano, John Kerry, a adoptar medidas para detener los ultrajes, pero se abstuvo de hacerlo.
En contrapartida, los movimientos palestinos Hamas, Yihad Islámica y el Frente Popular para la Liberación de Palestina, así como los Comités de resistencia Popular, celebraron el ataque, secuencia de una serie de actos de violencia contra la población palestina de Jerusalén.