Combatientes del movimiento popular huzí respaldados por las fuerzas gubernamentales yemeníes expulsaron a los milicianos de Ansar al Sharia, la filial de Al Qaeda en el país, de uno de sus últimos bastiones en el centro de Yemen este viernes en un intenso enfrentamiento en el que han muerto al menos 35 personas.


El movimiento Ansarulá, liderado por Abdel Malek al-Huzí, se ha convertido en la principal fuerza política en Yemen desde que tomó Saná en septiembre y luego avanzó hacia el sur y el oeste con destino a la provincia de Al Bayda, donde Ansar al Sharia se ha aliado con las tribus locales.

Al menos 25 huzíes y diez miembros de Ansar al Sharia y combatientes tribales han muerto en los combates, que comenzaron el jueves por la noche. Ansar al Sharia y sus alidados se retiraron al distrito de Yakla, en la frontera con la provincia de Maarib.


El jueves, los huzíes respaldaron al nuevo Gobierno en Saná que sustituye al que ellos obligaron a dimitir.

El mes pasado, un suicida de Al Qaeda mató a al menos 47 personas, en su mayoría huzíes, cuando se preparaban para participar en una concentración en Saná.