El estudiante Andrew Fryberg, de 15 años, falleció este viernes y se convirtió en la quinta víctima mortal del tiroteo ocurrido el 24 de octubre en el instituto de enseñanza secundaria Pilchuck de Marysville, en el estado de Washington (noroeste de EEUU).

Así lo confirmó la familia del joven en un comunicado en el que agradeció el apoyo de la comunidad y el trabajo de los médicos que intentaron salvar su vida.


El 24 de octubre, Jaylen Fryberg, de 15 años, disparó contra cinco de sus compañeros (dos chicos y tres chicas) cuando desayunaban en la cafetería del centro escolar, y después se suicidó.

Sólo ha sobrevivido uno de los chicos, que permanece ingresado en estado grave.

Varios estudiantes del instituto y familiares de Fryberg han apuntado en las redes sociales a un desengaño amoroso como móvil del tiroteo.

Los votantes del estado de Washington aprobaron en referendo este martes, dos semanas después del tiroteo, aumentar el control sobre la adquisición de armas de fuego.