El presidente Barack Obama anunció el miércoles por la noche que Estados Unidos iniciará una amplia campaña militar para "debilitar y destruir" a los terroristas del llamado Estado Islámico (DAESH) en dos volátiles países del Medio Oriente al autorizar por primera vez ataques aéreos dentro de Siria, así como una ampliación de los ataques en Iraq.


En una alocución al país, Obama también anunció el envío de casi 500 soldados más a Iraq para asistir a las abrumadas fuerzas de seguridad de ese país. Y exhortó al Congreso a aprobar un programa para armar y entrenar a “rebeldes” sirios que luchan tanto contra DAESH como contra el Gobierno del presidente Bashar Assad.

"Nuestro objetivo es claro: debilitaremos y a final de cuentas destruiremos a DAESH mediante una estrategia antiterrorista integral y sostenida", dijo.

El presidente descartó terminantemente la perspectiva de enviar tropas de combate a Iraq o Siria.

Rebeldes sirios se entrenarán en Arabia Saudí

Arabia Saudí aceptó abrir sus bases para que se entrenen “rebeldes” sirios moderados como parte de un esfuerzo para equiparlos mejor contra la amenaza de milicianos del grupo DAESH, dijo un funcionario estadounidense.

El presidente Barack Obama solicitará al Congreso autorización para proporcionar armas y entrenar a combatientes sirios.