Al menos 28 muertos, entre ellos 22 niños, dejó el accidente de un autobús de excursionistas belgas en un túnel de la localidad sureña suiza de Sierre, informaron  las autoridades locales.

Otros 24 niños, todos ellos en torno a los 12 años, resultaron heridos cuando el autobús que los llevaba de regreso de una excursión de esquí se impactó contra una de las paredes del túnel. Las razones del suceso por el momento son desconocidas.



El vehículo transportaba a 52 personas y quedó incrustado en la pared junto a una de las salidas de emergencia del túnel.Un helicóptero de rescate y varias ambulancias acudieron de inmediato al lugar para trasladar a los heridos.

El presidente de la localidad, François Genoud, declaró que se trata de "un drama sin precedentes en Suiza, una catástrofe terrible que ocurrió cuando el autobús apenas había recorrido una docena de kilómetros".

Genoud detalló que el túnel en el que ocurrió el accidente "no era más peligroso que otros lugares de la carretera", que la vía estaba "en muy buen estado" y que el siniestro tuvo lugar "en un tramo rectilíneo", por lo que "es difícil comprender lo que pasó".