Luego que el Estado Islámico (Daesh) reivindicara un video en el que es decapitado el periodista estadounidense James Foley, gran preocupación generó en el Reino Unido que el verdugo terrorista que aparece hablando en las imágenes tuviera acento británico.

Por eso, y porque es sabido que decenas de ingleses y europeos han dejado sus países para unirse a Daesh en Iraq y Siria, el primer ministro David Cameron, optó por regresar de sus vacaciones para liderar una serie de reuniones diplomáticas en Downing Street con el objetivo de discutir la situación en estos países.


La información fue confirmada por el secretario de exteriores, Philip Hammond, quien  reconoció que un británico podría ser el responsable del supuesto asesinato del fotoperiodista emitido en un video por daesh.

"De ser cierto, el brutal asesinato de James Foley es impactante y moralmente corrupto", dijo un vocero del Gobierno británico citado por el periódico The Guardian.

En una entrevista con la cadena BBC, el secretario de exteriores, señaló que "estamos muy preocupados por el hecho de que el asesino en cuestión sea británico y urgentemente estamos investigando. Agencias en ambos lados del atlántico están, primero que todo, verificando la veracidad del video y luego si podemos identificar la identidad del individuo en cuestión".

Días antes de que las imágenes fueran difundidas por los terroristas islámicos, Cameron, aseguró que no había necesidad de terminar con su descanso para evaluar la situación de Daesh.