Dos escaladores descubrieron el pasado jueves el cuerpo de Patrice Hyvert, un montañero congelado desde hace 32 años en el Mont Blanc, según han informado los medios locales.

Hyvert, que se entrenaba como guía, fue visto con vida por última vez el 1 de marzo de 1982, cuando tenía 23 años. El joven decidió escalar en solitario la cara oeste del Aiguille Verte, un afilado pico del Mont Blanc en la frontera con Italia, cuando le sorprendió una tormenta durante la tarde. Otro montañero fue rescatado de la misma montaña dos días después, pero nunca se encontró a Hyvert.


La Policía local ha confirmado que el cuerpo congelado es el del montañero desaparecido, como consta en el carné de identidad encontrado en su cartera.

El padre de Patrice Hyvert, Gerard, de 82 años, no se ha mostrado contento con el hallazgo. "Soy un hombre de montaña y habría preferido que se quedara ahí", ha dicho a la radio francesa RTL. "Estaba mejor en la montaña que en un ataúd", ha añadido.

El peligroso terreno y las inclemencias del tiempo hacen que varios escaladores mueran cada año en el Mont Blanc. Los cuerpos de los desaparecidos suelen aparecer años después cuando se derrite el hielo.