La guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN) afirmó el martes que llegó la hora en el país de que la paz sea un compromiso y una política de Estado y deje de estar al vaivén de los gobiernos de turno.

La paz es el supremo derecho del pueblo y debe ser garantizado por el Estado, subrayó esa fuerza insurgente en un comunicado difundido en internet.

Al referirse a la reelección del presidente Juan Manuel Santos en los comicios del domingo, el ELN expresó que este segundo gobierno tiene la obligación de ser diferente, porque debe cumplirle a ese gran movimiento que exige la paz con justicia social, equidad y libertad.


"Ahora, añadió, la paz es con cambios y transformaciones que favorezcan al pueblo".

Esa guerrilla, que se encuentra en diálogos exploratorios con el Gobierno con vistas a una eventual mesa de conversaciones, alertó que los llamados enemigos de la paz van a seguir conspirando por la guerra.

"Existe el reto de no caer en las provocaciones y las agresiones, que vendrán desde la bancada parlamentaria de (Alvaro) Uribe y de sus grupos paramilitares, que nunca se han desmovilizado y siguen imponiendo amplios controles territoriales", señala el texto.

La insurgencia sostuvo que el conflicto colombiano ha trascendido las fronteras nacionales y Santos tiene el reto de contribuir al equilibrio y la paz regional, como anunció en su campaña.
El reto del gobierno, dijo, es cumplir con la democratización, para que la paz sea una construcción en la que participen todos los sectores sociales.