La pareja que mató el domingo a dos policías y a un civil en un tiroteo en Las Vegas consideraba que las fuerzas de seguridad son "opresoras", informó el lunes la Policía de la ciudad.

"No hay ninguna duda de que los dos sospechosos tenían una aparente ideología vinculada a la milicia y a la supremacía blanca, pero no pensamos que ellos mismos fueran supremacistas blancos", dijo en una rueda de prensa Kevin McMahill, asistente del sheriff de Las Vegas, sobre Jared y Amanda Miller, de 31 y 22 años.

De acuerdo con la reconstrucción de los hechos de la Policía, Jared y Amanda ejecutaron al oficial Igor Soldo, de 31 años, por la nuca, y dispararon varias veces al agente Alyn Beck, de 41.


La pareja dejó sobre el cuerpo de Beck una esvástica y una bandera de Gadsden, vinculada a la revolución de EEUU, mientras que sobre el de Soldo depositó una nota que decía: "Esto es el inicio de la revolución".

El matrimonio se dirigió entonces a un supermercado Walmart, situado al otro lado del estacionamiento de la pizzería, y lanzó una ráfaga de disparos en la entrada para avisar a los presentes que se fueran.

Joseph Wilcox, un hombre de 31 años que en ese momento estaba pagando en la caja y llevaba una pistola, se enfrentó al hombre. "No se dio cuenta de que Amanda Miller iba con Jared Miller. Falleció en el instante", dijo McMahill.

La policía logró controlar a la pareja en la parte trasera de la tienda, donde se sucedieron varios tiroteos.

Según McMahill, el hombre se acostó frente a su esposa, quien le disparó varias veces hasta fallecer. Luego, se dio un disparo en la cabeza. La mujer seguía respirando cuando la policía la rodeó, pero falleció en el hospital.

Este es el cuarto tiroteo en el último mes en EEUU, después de los registrados en Seattle (noroeste) y Georgia (este), que dejaron un muerto cada uno, y el de hace un par de semanas en Santa Bárbara (California, oeste), donde un joven de 22 años apuñaló a tres personas y luego mató a tiros a otras tres.