El presidente estadounidense Barack Obama pudiera autorizar muy pronto a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) el entrenamiento militar de los combatientes que buscan derrocar al mandatario sirio Bashar al-Assad, informó el diario The Wall Street Journal.

Aunque Obama sigue sin comprometerse de forma total con el programa, la CIA trata de limar detalles sobre el lugar donde ocurrirá la preparación, así como la cantidad de efectivos a los cuales brindar alistamiento, explicó.

Un funcionario del gobierno, que solicitó el anonimato, aseguró que la Casa Blanca sigue apostando por el fortalecimiento de lo que denomina como oposición moderada, con el objetivo de lograr un cambio de régimen en Damasco.


De concretarse la medida, constituiría una nueva vuelta de tuerca del apoyo mantenido por Washington a los grupos irregulares que desde hace más de tres años intentan liquidar al gobierno constitucional sirio.

La administración de Obama parece estar preocupada por varios reveses sufridos por los grupos de la calificada como oposición armada y el avance del Ejército Árabe Sirio en distintas zonas de la nación mesoriental, indicó la fuente.

Hasta el momento, el gobierno estadounidense ha desembolsado unos 287 millones de dólares para respaldar a dichos grupos, detalló.

A inicios de mes, el líder de la denominada Coalición Nacional de las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria (Cnfros), Ahmed Yarba, visitó Estados Unidos, se reunió con varios funcionarios, entre ellos el propio presidente Obama y solicitó armamento adicional con el objetivo de derrocar al Presidente sirio.

Estados Unidos y varios gobiernos de países europeos y de Oriente Medio brindan amplia asistencia financiera, logística y mediática a dichos grupos copados con más de 100 mil mercenarios de 83 países, según distintas fuentes.


A fines de enero, el Congreso estadounidense aprobó en secreto el envío de armas y ayuda financiera a las bandas armadas en Siria.

La asistencia incluye varios tipos de cohetes antitanques, municiones de infantería y otros abastecimientos indispensables para las acciones de los llamados "sectores moderados" dentro de los grupos subversivos.

Asimismo, Washington evalúa posibles opciones militares contra Siria, que incluyen el incremento de la ayuda a las bandas armadas y el establecimiento de una zona de prohibición de vuelos, señaló semanas atrás la cadena televisiva CNN.