Funcionarios de la Armada chilena ubicaron en la zona de Quellón en la isla de Chiloé, restos de la avioneta Piper Navajo, desaparecida desde el pasado jueves.

Se conoció que al menos cinco personas de los ocho ocupantes murieron en el accidente, informó el Servicio Médico Legal de Ancud mediante un comunicado.

En la aeronave viajaban un total de ocho personas y fue declarada como desaparecida el jueves. Los primeros restos del fuselaje fueron hallados este viernes por la tarde por un grupo de pescadores, según ha informado el comandante de la Tercera Brigada de la Fuerza Aérea chilena, Juan González.



Hasta el momento sólo se ha podido confirmar la muerte de tres de las personas que viajaban en la aeronave siniestrada, ha explicado a la prensa el ministro chileno de Defensa, Andrés Allamand, quien ha destacado que trabajadores especializados se encuentran en la zona buscando a posibles supervivientes.

Las primeras hipótesis apuntan a que la aeronave se estrelló en un cerro de unos 1.800 metros de altura, situado en el sector Piedra Blanca. "En definitiva, el impacto se produjo en la ladera sureste", ha precisado Allamand.

La avioneta, una Piper Navajo de la empresa Aerohein, partió por la mañana del jueves desde la isla con destino a la localidad de Quellón, en la Isla Grande de Chiloé, un trayecto dura unos 20 minutos. La torre de control perdió contacto con la aeronave seis minutos después del despegue, según han informado medios locales.