Los manifestantes han recorrido las calles tras la muerte de Berkin Elvan


La Policía turca ha empleado cañones de agua para repeler a los miles de manifestantes que se aproximaban a la céntrica plaza Taksim, en Estambul, durante una protesta tras la muerte de un adolescente que resultó herido en las manifestaciones del verano pasado.

Los manifestantes del distrito Osmanbey figuraban entre las decenas de miles de personas que han recorrido las calles de la ciudad por el funeral de Berkin Elvan, de quince años, que falleció ayer tras nueve meses en coma después de ser alcanzado por un bote de gases lacrimógenos.

Previamente, la Policía había empleado gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar una protesta que se celebraba en la plaza de Kizilay, en Ankara, por la muerte del adolescente.