Funcionarios estadounidenses anunciaron que Washington ha reanudado el envío de armas “no letales” a la oposición siria, tras un mes de suspensión. Esta decisión viene en respuesta a la confiscación de depósitos de armas pertenecientes al llamado Ejército Libre por parte de milicianos del grupo llamado Frente Islámico en el paso fronterizo con Turquía, bab Alhawa.

Según la agencia Associated Press, funcionarios americanos dijeron que “se ha reanudado el envío de aparatos de comunicación y otros materiales a la oposición siria, pero únicamente se entregan a los grupos no armados”.


“Las ayudas enviadas pasan a través de Turquía en coordinación con el Consejo Militar del Ejército Sirio liderado por Salim Idris”, declararon los funcionarios. Y reiteraron que “la decisión de suspender las ayudas, tomada en diciembre pasado por la Administración del Presidente Obama, fue una medida de precaución para asegurar que las ayudas llegasen a su destino”.

De otra parte, el líder del partido “Unión Democrático Kurdo” en Siria, Saleh Muslem, acusó a Turquía de “suministrar armas y entrenamientos a los miembros de la organización Al-Qaeda para luego enviarlos a Siria”.


Muslem dijo en una entrevista con el diario turco “Huriyat” que “los camiones turcos interceptados y retenidos últimamente dentro de Turquía estaban llenos de armas y se dirigían a los milicianos de Al-Qaeda en Siria”.

“Los prisioneros de Al-Qaeda, en manos del partido Unión Democrático, confesaron que recibían armas de Turquía, y que recibieron adiestramiento militar en las montañas de Bolo, sitas entre Ankara y Estambul”, agregó.