El ambiente político entre el régimen israelí y Estados Unidos sigue siendo crítico, pues el Gobierno de Washington se queja de las presiones de los lobbies proisraelíes en el Congreso del país norteamericano.

Según un funcionario de la Casa Blanca en declaraciones a una emisora israelí, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en varias ocasiones han revelado su disgusto por los "reiterados ataques de líderes de la comunidad judía” a las decisiones del Ejecutivo, ha emitido este jueves la radio israelí.


Esta noticia se divulga una semana después de que el ministro de asuntos militares del régimen de Tel-Aviv, Moshe Yaalon, pidiera disculpas a Kerry por haberlo llamado "obsesivo" y "mesiánico”.

"Lo único que puede salvarnos es que John Kerry recoja su premio Nobel y nos deje en paz", dijo Yaalon, en su crítica a Kerry por haber ofrecido el plan para el denominado proceso de paz palestino-israelí.

No es la primera vez que las autoridades estadounidenses expresan su molestia por comentarios israelíes. Al respecto, los periodistas Mark Halperin y John Heilemann escribieron un libro titulado “Double Down: Game Change 2012”, en el que mencionan que Obama, durante su campaña presidencial en 2012, se refirió al primer ministro del régimen israelí, Benyamin Netanyahu, como "un grano en el culo".