No es nada casual que el volumen y la expansión de la propaganda sionista, que llega hoy a ocupar dos terceras partes de la llamada industria mediática en el mundo, nos pone ante la evidencia de que el funcionamiento de esta, responde a los intereses de sus inventores. cabe destacar y subrayamos el hecho de no existencia de un Ministerio de Información en “Israel”, existe allí la Oficina Central de Información (OCI), junto a la Oficina Gubernamental de Prensa, un solo departamento perteneciente a la Oficina del Primer Ministro, la tarea de la (OCI )consiste en alimentar el periodismo local y extranjero, dicha oficina contiene departamentos de investigaciones, un centro de bibliografías  y documentaciones y esto sin mencionar el trabajo que elabora el Ministerio de Relaciones Exteriores, en fin es un laboratorio mediático donde se fabrican los hechos, se tergiversan las realidades y se centran los objetivos para preparar el momento auspicioso en provocar los enfrentamientos debidos a  las imágenes  distorsionada de la realidad. Ocultan las verdades,  difunden mentiras reiteradas, recurren al engaño y al falso sentimentalismo con tal de lograr sus propósitos,  canalizando todo el esfuerzo  al servicio de sus planes. Pareciera que asimilaron perfectamente la doctrina de Joseph Goebbels, ministro de Propaganda nazi “Miente, miente, que al final algo quedará... ...cuanto más grande sea una mentira, más gente lo creerá...".

Goebbels era un genio de la propaganda, unos famosos principios impulsaron su trabajo y que  todavía son utilizados por los grandes laboratorios mediáticos   como herramienta propagandística. Hoy en día vuelve a la palestra el mismo escenario convencional de artimañas mediáticas con nuestra muy  cuestionada “Primavera Árabe” reflejando en primer plano los titulares  en   muchos diarios internacionales: «Las tropas sirias matan 18 bebés prematuros”, repitiendo el viejo truco empleado por una agencia publicitaria mil and knowlton que había sido contratada para dirigir a la opinión mundial durante la Guerra del Golfo que llegó hasta el Consejo de Seguridad de la ONU en boca del entonces presidente norteamericano George Bush padre.

Una guerra convencional y sistemática para preparar el terreno a una invasión premeditada, y bajo el pretexto de violaciones a los derechos humanos  sensibilizando a la opinión pública e incitando en ella el rechazo a tales acciones sirviendo de la imagen de niños muertos para satanizar al gobierno frente a las masas mundiales. Este tipo de  “propaganda” de guerra  Se remonta al año 1917 en la presidencia de Woodrow Wilson quien, para obtener el apoyo del pacífico pueblo norteamericano en el conflicto de la Primera Guerra Mundial, lo que beneficiaría pecuniariamente a sus amigos los señores de la industria, permitió la difusión de una campaña con fotos trucadas en las que se veían a soldados alemanes matando a niños belgas, campaña masiva que a los pocos meses obtuvo una reacción anti germánica que dio luz verde a la participación en la guerra por parte de EEUU.

Hoy en día se repite el panorama en Siria, guerra mediática, juegos psicológicos para tratar de derrocar al gobierno unísono, legítimo y resistente, basta subrayar las palabras del ex secretario de Estado de los Estados Unidos Henry kissenger para entender el complot  y la mentira que chocaron con la verdad y la valentía del  pueblo gallardo de Siria , aunado a ellos el fracaso de su plan  macabro y diabólico elaborados en sus laboratorios negros: «Hice un gran esfuerzo en el pasado para llegar a un acuerdo con el ex presidente sirio Hafez al-Assad, y tengo que reconocer mi derrota. Ahora su hijo me ha dejado sorprendido, la mayoría de sus compatriotas lo aman”.

En definitiva aunque nos encontramos aún en una etapa de guerra no convencional, con envío de mercenarios y de fuerzas especiales para desestabilizar el país, la narración que ofrecen la OTAN y sus aliados del Golfo ya se aleja considerablemente de la realidad. Y el abismo entre esa imagen y la realidad de los hechos irá acentuándose cada vez más. Nos concierne desmontar sus planes a través de una  apertura mediática que nos ofrece la expansión y la creación de medios alternativos gracias a la alianza estratégica del Sur - Sur para contrarrestar la avaricia de las grandes potencias internacionales. EL PUEBLO VIVE,  LA LUCHA SIGUE.