Internacional
Trípoli rehén de los grupos armados y sus patrocinadores
Aumentan a 12 muertos y más de 80 heridos las víctimas en choques en Líbano
La ciudad norteña de Trípoli se balancea al borde del abismo, víctima de los caprichos de francotiradores y líderes de grupos armados que la convirtieron en rehén de sus complejos y sus vínculos con el exterior.
En la última semana, 12 personas han muerto y 80 han resultado heridas en choques registrados entre los barrios Bab el Tabené y Yabal Mehesen, entre ellos 4 muertos y 25 heridos en las últimas 24 horas, en la segunda ciudad de Líbano.
Con el inicio de una nueva semana, parece que la ciudad tiene cita con una “modalidad” diaria, la situación se calma de día mientras al caer la noche estallan los combates. Solamente los francotiradores no descansan y “operan” día y noche.
El Ejército Libanés trata de controlar la situación, a veces con determinación y otras con cordura. Algunas unidades del ejército tuvieron que poner barricadas en varios puntos de la ciudad para proteger a sus miembros convertidos en blanco de los ataques de los armados.
Además de la presiones en el terreno, el Ejército sufre otro tipo de presiones, el político. El diputado del partido Mustakbal, Saad al Hariri, cargó contra el ejército, y se preguntó si las Fuerzas Armadas se convirtiesen en “falsos testigos” en la guerra declarada contra Trípoli, asimismo acusó al Gobierno de ser responsable de “abandonar la ciudad a su suerte”.
Por su parte, el ministro de interiores, Marwan Cherbel, declaró que “el Ejército libanés comenzó ayer en Trípoli a aplicar un nuevo plan de seguridad para acabar con los combates y reforzó sus posiciones en Yabal Mohsen”, señalando que la situación es difícil. “Trípoli está pagando el precio de disputas nacionales y regionales”, aseveró.
De otro lado, el diario libanés “An-nahar” publicó que “la situación explosiva en Trípoli amenaza con malas repercusiones a nivel nacional”, y que llama la atención las declaraciones del jeque Salem Rofaí quién predicó “la llegada de milicianos pertenecientes a los grupos radicales (Estado Islámico en Iraq y Levante – frente al Nusra) para participar en los combates en Trípoli si continúan las agresiones del Partido Árabe Democrático”, según la expresión de Rofaí.
El primer ministro saliente Nayib Mikati instó hoy a los libaneses a permanecer unidos para "hacer frente al complot contra la ciudad y no ser títeres". "Somos el espejo de los sucesos en la región y debemos estar por encima de ellos", agregó.
Fuentes en Trípoli afirman que “Arabia Saudita no quiere que los combates en Trípoli se detengan”, informó el diario Al-Akhbar.