Las automotrices Nissan y Mitsubishi han acordado iniciar negociaciones para que Nissan adquiera un 34% de la segunda y pase a ser su mayor accionista, por delante de Mitsubishi Heavy Industries, que detenta el 20%.


La operación, valorada en unos 2.000 millones de euros, se daría a través de una ampliación de capital, tras una emisión de 506,6 millones de acciones ordinarias nuevas por parte de Mitsubishi Motors (MMC). La operación se firmará el próximo 25 de mayo y se cerrará en torno a octubre. Además, será necesario el visto bueno de las autoridades regulatorias, de modo que la operación no podrá quedar cerrada hasta finales de este año.

El presidente de Nissan, Carlos Ghosn, ha explicado en una rueda de prensa que la alianza permitirá a Mitsubishi recuperar la confianza pública, en medio de un escándalo de falseo de datos en los tests de consumo de carburantes que afecta a más de 625.000 vehículos. Se trata de modelos de minivehículos vendidos en su totalidad en Japón.

“Creo que Nissan puede ejercer además un efecto positivo del mismo modo que Mitsubishi Motors puede ejercerlo sobre nosotros, ya que es una empresa muy potente por ejemplo en regiones como el sureste asiático o en modelos 4x4 o “pick-up”, añadió Ghosn. “Todos ganarán, tanto Nissan como Mitsubishi Motors”, sostuvo.

La compañía, que trabaja en un plan para indemnizar a los afectados, se expone a fuertes multas en su mercado de origen, donde los automovilistas pueden disfrutar de exenciones fiscales por el uso de vehículos más eficientes.