El régimen sionista ha indemnizado con 220.000 dólares (poco más de 200.000 euros) a la familia del cabo malagueño Francisco Javier Soria Toledo, quien falleció el 28 de enero de 2015 en un bombardeo del Ejército hebreo contra posiciones de Hezbolá en Líbano, según ha informado la prensa israelí.

El cabo Soria, destinado en la Brigada “Guzmán el Bueno” X de Córdoba, pertenecía al contingente español desplegado en la misión de la ONU en Líbano (FINUL) y se encontraba en una torre de vigilancia situada en la Línea Azul (la demarcación de la retirada del ejército israelí establecida por Naciones Unidas en el año 2000) cuando los artilleros israelíes bombardearon la zona.


El bombardeo israelí que acabó con la vida del casco azul español respondía a un ataque de Hezbolá que había matado a dos soldados hebreos. Las investigaciones que llevaron a cabo el Ejército español, la ONU y el gobierno sionista determinaron que los artilleros israelíes cometieron "varios errores" al disparar que llevaron a bombardear la torre de vigilancia y no las posiciones de Hezbolá.

Por este hecho el ejército de ocupación israelí tomó medidas disciplinarias contra los militares responsables y el régimen hebreo ha indemnizado con algo más de 200.000 dólares a la mujer del cabo Soria, que cuando tuvo lugar el ataque estaba a punto de dar a luz.

El ministro de Defensa español, Pedro Morenés, afirmó tras la muerte del militar que el bombardeo sobre las posiciones de la ONU en Líbano fue "mucho más una imprudencia que una intencionalidad" y que “Israel” había "reconocido su responsabilidad". Además, aseguró que el hecho de que el gobierno hebreo fuese a indemnizar a la familia era un hecho "sin precedentes" para la entidad sionista.