Tecnología
Logran ralentizar la velocidad de la luz hasta 180 kilómetros por hora
Este estudio revolucionará la futura internet cuántica basada en fibra de vidrio
No es fácil enlentecer la luz que, sin nada que la refrene, viaja a 300.000 kilómetros por segundo. Algunas técnicas han logrado ralentizarla hasta velocidades propias de vehículos comunes, e incluso detenerla, pero es difícil hallar un método que sea lo bastante asequible y práctico como para plantearse enlentecer luz en aplicaciones fuera de los laboratorios, como por ejemplo en el naciente campo de la tecnología cuántica.
La luz es una herramienta de enorme utilidad para la comunicación cuántica, pero tiene una gran y obvia desventaja: viaja habitualmente a la velocidad de la luz y no puede ser retenida. Unos científicos han hallado una vía asequible para resolver este problema, y no solo en sistemas cuánticos exóticos, sino también en las redes de fibra óptica que ya se usan hoy en día.
Acoplando átomos a fibras de vidrio, el equipo de Arno Rauschenbeutel, del Centro de Ciencia y Tecnología Cuántica de Viena y la Universidad Tecnológica de Viena, ambas entidades en Austria, consiguió enlentecer la luz hasta una velocidad de 180 kilómetros por hora. Estos investigadores lograron incluso detenerla por completo y volverla a poner en marcha más tarde.
Partiendo de la circunstancia de que cuando la luz es enviada a través de un medio como el vidrio o el agua se enlentece un poco debido a su interacción con el material, en el nuevo sistema se ha explotado este efecto hasta un nivel extremo.
Esta tecnología, eficaz y asequible, es un requisito previo importante para una futura internet cuántica basada en fibra de vidrio, en la que la información cuántica pueda ser teletransportada a grandes distancias.
| No es fácil enlentecer la luz que, sin nada que la refrene, viaja a 300.000 kilómetros por segundo. Algunas técnicas han logrado ralentizarla hasta velocidades propias de vehículos comunes, e incluso detenerla, pero es difícil hallar un método que sea lo bastante asequible y práctico como para plantearse enlentecer luz en aplicaciones fuera de los laboratorios, como por ejemplo en el naciente campo de la tecnología cuántica.
La luz es una herramienta de enorme utilidad para la comunicación cuántica, pero tiene una gran y obvia desventaja: viaja habitualmente a la velocidad de la luz y no puede ser retenida. Unos científicos han hallado una vía asequible para resolver este problema, y no solo en sistemas cuánticos exóticos, sino también en las redes de fibra óptica que ya se usan hoy en día.
Acoplando átomos a fibras de vidrio, el equipo de Arno Rauschenbeutel, del Centro de Ciencia y Tecnología Cuántica de Viena y la Universidad Tecnológica de Viena, ambas entidades en Austria, consiguió enlentecer la luz hasta una velocidad de 180 kilómetros por hora. Estos investigadores lograron incluso detenerla por completo y volverla a poner en marcha más tarde.
Partiendo de la circunstancia de que cuando la luz es enviada a través de un medio como el vidrio o el agua se enlentece un poco debido a su interacción con el material, en el nuevo sistema se ha explotado este efecto hasta un nivel extremo.
Esta tecnología, eficaz y asequible, es un requisito previo importante para una futura internet cuántica basada en fibra de vidrio, en la que la información cuántica pueda ser teletransportada a grandes distancias.