Tecnología
Inventan un generador de rayos máser
El aparato será usado en la computadora cuántica
Unos científicos han construido un dispositivo que genera rayos máser y tiene el tamaño de un grano de arroz. El aparato está energizado por electrones individuales enviados de uno en uno, mediante una técnica especial a través de estructuras conocidas como puntos cuánticos. Entre las aplicaciones potenciales del nuevo dispositivo, destaca su uso para la computación cuántica.
Un máser es similar al láser convencional, pero está basado en microondas. Se logró generar rayos máser antes incluso de que fuera desarrollada la tecnología empleada para generar en 1960 los primeros rayos láser.
Los puntos cuánticos son trocitos de material semiconductor que actúan como átomos individuales, y que se pueden emplear como componentes en las computadoras cuánticas.
Los ordenadores convencionales almacenan la información valiéndose de los bits tradicionales, los cuales pueden tomar uno de dos valores: 0 ó 1. La potencia de una computadora cuántica, un nuevo tipo de ordenador hacia cuyo diseño y construcción se viene trabajando desde hace algunos años, proviene de las extrañas leyes de la mecánica cuántica, que describen el universo de las partículas subatómicas.
La mecánica cuántica estipula que un electrón puede rotar en una dirección, y representar un 1, o en otra dirección, y representar un 0. Pero también puede estar en un exótico estado, llamado "superposición", en el que representa al mismo tiempo a todos los estados existentes entre 1 y 0. Si se consigue construir una máquina funcional que aproveche esto, se abrirían campos completamente nuevos de la computación, que permitirían resolver problemas que no pueden ser resueltos con un ordenador normal. Los esfuerzos para diseñar y fabricar un modelo que funcione se han multiplicado en los últimos años, y la computación cuántica se ha vuelto una meta perseguida por instituciones científicas de todas partes del mundo.
El nuevo y diminuto máser, o láser de microondas, utiliza aproximadamente una milmillonésima parte de la corriente eléctrica necesaria para alimentar un secador de pelo, y es una demostración de las interacciones fundamentales entre la luz y los electrones en movimiento.
Una ventaja del nuevo máser es que los niveles de energía dentro de los puntos cuánticos pueden ser ajustados de forma precisa para producir luz en otras frecuencias, lo que no puede hacerse con otros láseres de semiconductor, en los cuales la frecuencia queda fijada durante la fabricación. Cuanto mayor es la diferencia de energía entre los dos niveles, mayor es la frecuencia de la luz emitida.
| Unos científicos han construido un dispositivo que genera rayos máser y tiene el tamaño de un grano de arroz. El aparato está energizado por electrones individuales enviados de uno en uno, mediante una técnica especial a través de estructuras conocidas como puntos cuánticos. Entre las aplicaciones potenciales del nuevo dispositivo, destaca su uso para la computación cuántica.
Un máser es similar al láser convencional, pero está basado en microondas. Se logró generar rayos máser antes incluso de que fuera desarrollada la tecnología empleada para generar en 1960 los primeros rayos láser.
Los puntos cuánticos son trocitos de material semiconductor que actúan como átomos individuales, y que se pueden emplear como componentes en las computadoras cuánticas.
Los ordenadores convencionales almacenan la información valiéndose de los bits tradicionales, los cuales pueden tomar uno de dos valores: 0 ó 1. La potencia de una computadora cuántica, un nuevo tipo de ordenador hacia cuyo diseño y construcción se viene trabajando desde hace algunos años, proviene de las extrañas leyes de la mecánica cuántica, que describen el universo de las partículas subatómicas.
La mecánica cuántica estipula que un electrón puede rotar en una dirección, y representar un 1, o en otra dirección, y representar un 0. Pero también puede estar en un exótico estado, llamado "superposición", en el que representa al mismo tiempo a todos los estados existentes entre 1 y 0. Si se consigue construir una máquina funcional que aproveche esto, se abrirían campos completamente nuevos de la computación, que permitirían resolver problemas que no pueden ser resueltos con un ordenador normal. Los esfuerzos para diseñar y fabricar un modelo que funcione se han multiplicado en los últimos años, y la computación cuántica se ha vuelto una meta perseguida por instituciones científicas de todas partes del mundo.
El nuevo y diminuto máser, o láser de microondas, utiliza aproximadamente una milmillonésima parte de la corriente eléctrica necesaria para alimentar un secador de pelo, y es una demostración de las interacciones fundamentales entre la luz y los electrones en movimiento.
Una ventaja del nuevo máser es que los niveles de energía dentro de los puntos cuánticos pueden ser ajustados de forma precisa para producir luz en otras frecuencias, lo que no puede hacerse con otros láseres de semiconductor, en los cuales la frecuencia queda fijada durante la fabricación. Cuanto mayor es la diferencia de energía entre los dos niveles, mayor es la frecuencia de la luz emitida.