Más de 50 mezquitas e iglesias sufrieron actos vandálicos en Palestina ocupada durante los últimos 8 años, informan medios locales israelíes.

Unos 53 templos musulmanes y cristianos sufrieron actos de vandalismo por grupos extremista judíos en la ocupada Cisjordania y la ciudad de Al-Quds, desde 2009, pero en sólo nueve de estos casos hubo personas detenidas, publicó el diario israelí Haaretz, citando datos del Ministerio de Seguridad Pública.

El último de estos ataques tuvo lugar el 20 de septiembre en la iglesia de San Esteban, en el monasterio Beit Jimal, a unos 25 km de Al Quds (Jerusalén), en territorio dominado por la ocupación israelí. Se trata del tercer ataque que sufre este monasterio en cinco años.

Durante el ataque varios vitrales fueron destrozados, así como estatuas de la Virgen y hasta ahora no ha habido detenidos.

Los colonos sionistas, que cuentan con la luz verde del ejército israelí para agredir a los palestinos, profanan los lugares sagrados de musulmanes y cristianos, dentro de sus esfuerzos, hasta ahora infructuosos, para obligarlos a abandonar su propia tierra.

“Sin ninguna duda, la policía no está dedicando mucho tiempo a estos crímenes. Por ejemplo, sabemos que después del ataque contra la iglesia de los Panes y los Peces, en Galilea en 2015, alguien en el Gobierno decidió que había que encontrar a los culpables, y los encontraron”, dijo a Haaretz Gadi Gvaryahu, director de la organización israelí Tag Meir, que investiga estos actos de vandalismo contra lugares sagrados.

El régimen de Tel Aviv publicó con anterioridad un mapa de la Ciudad Vieja de Al Quds, en el que borra los importantes sitios sagrados musulmanes y cristianos.

Además, los colonos extremistas irrumpen con gran frecuencia en la Mezquita de Al Aqsa, el tercer lugar más sagrado del Islam, y sus explanadas, que según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) cometen “provocaciones religiosas”.