La visita de Bashar al Assad a Teherán contiene un gran mensaje oculto pero grandioso

El presidente de Siria, Bashar al Assad, rechazó la oferta de EEUU de quedarse en el poder a cambio de cortar relaciones con la República Islámica de Irán y con Hezbolá.

El director general para Asuntos Internacionales del Parlamento iraní, Hosein Amir Abdolahian, declaró el miércoles que la reciente visita de Bashar al Assad a Teherán frustró los planes de los enemigos que buscaban separar a Siria de Irán y del Movimiento de Resistencia Islámica de Líbano (Hezbolá).

El también exvicecanciller iraní aseguró que tal visita demuestra el “no” rotundo del presidente sirio al nuevo juego político de EEUU, que intentó asegurar a Al Assad la presidencia de por vida a cambio de mantener a su país alejado de Irán y Hezbolá.

Con este viaje a Irán, prosiguió Amir Abdolahian, el mandatario sirio envió un fuerte mensaje a los enemigos de que la República Islámica de Irán y Siria, con el apoyo de sus aliados, custodiarán el Eje de la Resistencia por la paz y seguridad de la región.

“La visita de Bashar al Assad a Teherán contiene un gran mensaje oculto pero grandioso y su encuentro, en este momento, con el líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, y su homólogo iraní, Hassan Rohani, se llevó a cabo por varios objetivos”, remachó el alto funcionario iraní.

A juicio de distintos expertos, el viaje a Irán del jefe de Estado sirio trasmite un mensaje de firmeza ante las amenazas de Estados Unidos y el régimen sionista y pone de relieve los profundos lazos estratégicos que unen a Teherán y Damasco, así como su postura común frente al terrorismo y los complots de Washington en la región.