Fuerzas especiales estadounidenses llevaron a cabo el pasado domingo una operación secreta en territorio del grupo terrorista Daesh en Siria, matando a uno de los cabecillas de la organización y tomando prisioneros. Según una versión no confirmada, al mismo tiempo habrían sido rescatados dos rehenes.

El diario británico “Telegraph” informó de fuentes locales que la operación de desembarco ocurrió la tarde del domingo, los comandos descendieron de cuatro helicópteros en un pequeño pueblo cerca de Deir Ezzor. El objetivo de la operación era “liberar rehenes”, según el diario.


Por su parte, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos dijo que la operación duró dos horas, y que 25 terroristas de Daesh habían muerto en el ataque, mientras otros cayeron prisioneros.

El objetivo de la operación era liberar rehenes. “En la zona hay una prisión secreta de Daesh en la que podrían encontrarse occidentales secuestrados, pero desconocemos los nombres debido a que la organización cercó la zona después del desembarco”, indicó la fuente de “Telegraph”.

El Pentágono reconoció que la operación se había producido, sin dar más detalles de la naturaleza y el objetivo de la operación.

La versión oficial del Pentágono se limitó a decir, ayer, que un vehículo de Daesh había sido interceptado, que hubo un tiroteo en el que murió el cabecilla de Daesh al que se pretendía apresar y que los helicópteros se retiraron al cabo de 90 minutos, llevándose tanto cautivos como cadáveres. No hubo bajas entre el grupo de asalto.