Siria acusó a Estados Unidos de apoyar a grupos terroristas en el asalto a la histórica ciudad de Palmira, de donde fueron expulsados en marzo de este año.

En una entrevista a la televisión rusa, el presidente sirio, Bashar Al Assad, dijo que los terroristas pudieron atacar a Palmira mucho antes, pero lo hicieron ahora, cuando las tropas sirias están por recuperar a Alepo.

Una gran fuerza de elementos violentos atacó a Palmira con nuevos armamentos con los que nunca soñaron contar y se hicieron, además, de localidades aledañas donde hay gran cantidad de yacimientos petroleros, precisó el mandatario.


Al comentar anuncios de Washington de que se prepara una agrupación de 45 mil armados para luchar contra el movimiento terrorista Daesh, Al Assad consideró que muchos de ellos en realidad forman parte de esa propia formación terrorista.

La Casa Blanca solo busca lavar la imagen de los terroristas, como también pudo mentir al hablar de un levantamiento de la prohibición para el envío de armamentos a quienes insisten en considerar como oposición moderada.

Washington suele decir mentiras y la orden de levantar la veda a tales suministros pudo realizarse mucho antes, comentó.

Al Assad consideró que la acción de Palmira no solo estuvo relacionada con la posible salida de miembros de Daesh de la ciudad iraquí de Mosul hacia suelo sirio, sino también con elementos de ese grupo provenientes de la provincia de Raqqa.

El asalto a Palmira busca, probablemente, desviar la atención hacia esa ciudad de las tropas de choques sirias. Por eso recién tuvo lugar una reunión de la jefatura rusa y la siria para determinar los pasos a seguir en el futuro, confirmó.

Por otro lado, después de la liberación total de Alepo será necesario garantizar su defensa y reconoció que existen riesgos, pues hay elementos armados fuera de esa ciudad y comunicación de éstos grupos con la citada localidad desde la vecina Idlib.

El presidente sirio consideró que la actual administración norteamericana de Barack Obama intenta controlar el caos hasta lograr una relativa estabilidad que le sea de su conveniencia.