Seleccionados
Declaración de la Embajada de Cuba en Beirut
Cuba denuncia la arrogancia de Estados Unidos y exige fin al bloqueo
En presencia de varios medios de comunicación libaneses, el embajador cubano en Líbano, René Ceballo Prats, desde la sede de la Embajada en Beirut, hizo pública una declaración en la cual denunció el injusto bloqueo económico, comercial y financiero que mantiene Estados Unidos contra Cuba, y condenó la arrogancia de Estados Unidos, asimismo explicó que Cuba presentará un proyecto en la Asamblea General de Naciones Unidas para poner fin al bloqueo contra Cuba.
A continuación el texto entero de la declaración:
Estimados amigos y amigas de los Medios de Prensa, primero que todo les doy la bienvenida a nuestra Embajada, que es también su casa, y les agradezco la gentileza de acompañarnos en este breve encuentro.
Aprovechamos este momento para enviarle un fraternal saludo a sus lectores, televidentes y radioescuchas y al hermano pueblo libanés, de parte de mi gobierno y del glorioso y digno pueblo de Cuba. También nuestro agradecimiento a las autoridades libanesas por su histórico apoyo a la Resolución cubana contra el Bloqueo.
Estimados amigos, hoy martes 29 de octubre, Cuba pondrá a consideración de la Asamblea General de las Naciones Unidas por vigésima segunda vez consecutiva el proyecto de resolución titulado “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.
Esta resolución ha sido de las más apoyadas en la historia de las Naciones Unidas. En el año 2012, de 192 Estados Miembros, 188 votaron a favor, evidencia indiscutible de que casi la totalidad de la comunidad internacional reconoce y apoya al pueblo cubano en su lucha por el levantamiento del bloqueo. Por supuesto como en anteriores ocasiones, votaron en contra los Estados Unidos de América y su lacayo, el estado sionista.
Desde su propia concepción, el bloqueo es una flagrante violación del Derecho Internacional, es contrario a los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y constituye una trasgresión al derecho a la paz, el desarrollo y la seguridad de un Estado soberano.
Por su declarado propósito, califica como un acto de genocidio, en virtud de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de Ginebra de 1948.
El bloqueo es el principal obstáculo para el desarrollo económico de Cuba. El pueblo cubano enfrenta graves pérdidas económicas, las cuales ascienden hasta abril de 2013, tras cinco décadas de aplicación del bloqueo, a 1 157 327 000 000 de dólares estadounidenses, si se considera la depreciación del dólar frente al valor del oro en el mercado internacional. ¡Cuando no habría avanzado nuestro país con esos recursos y cuanto sufrimiento se habría evitado a nuestro pueblo! El bloqueo es la mayor violación a los derechos humanos de todo un pueblo.
Todos los sectores y ramas de la economía y de la vida social son afectados por este criminal instrumento, pero es mucho más nocivo y apreciable su inhumano efecto, en el campo de la medicina.
Las restricciones impuestas por los sucesivos gobiernos norteamericanos incluyen la prohibición de la compra de medicinas y equipos médicos básicos para la atención a pacientes de dolencias graves, entre ellos niños con algunos tipos de cáncer. La mayoría de los medicamentos que Cuba importa proviene de regiones distantes ante la imposibilidad de adquirirlos en un mercado geográficamente natural, como sería Estados Unidos o sus empresas subsidiarias. Ante la rotura de un equipo, se hace imprescindible adquirir los repuestos en mercados lejanos, con el consiguiente aumento en los costos del flete.
En el estreno de su Administración en el año 2009, el Presidente Obama anunció un nuevo comienzo con Cuba, y manifestó su convicción de que se podía llevar la relación entre Cuba y Estados Unidos en otra dirección. Cinco años más tarde sólo se ha podido comprobar el recrudecimiento de la dimensión extraterritorial del bloqueo y la intensificación de la persecución de las transacciones financieras internacionales de Cuba.
En ese período el bloqueo ha demostrado ser el principal obstáculo al desarrollo económico y social cubanos, el más importante impedimento para una mayor expansión de los vínculos comerciales de Cuba con el mundo, y se erige como un serio freno a la cooperación internacional que ofrece y recibe el país.
Cuba continúa sin poder exportar e importar libremente productos y servicios hacia o desde los Estados Unidos, no puede utilizar el dólar en sus transacciones financieras internacionales o tener cuentas en esa moneda en bancos de terceros países. Para Cuba también están vedadas las asistencias que puedan brindar las instituciones financieras internacionales.
La obsesiva persecución y hostigamiento de la Oficina para el Control de los Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro, a quienes establezcan o se propongan establecer normales relaciones con Cuba, es una de las principales características de la dimensión extraterritorial del bloqueo.
Desde enero de 2009 hasta el 9 de septiembre de 2013, el Gobierno de Obama había obligado a 30 entidades norteamericanas y extranjeras a pagar más de 2 mil 446 millones de dólares por relacionarse con Cuba y otros países sancionados.
Cuba considera que el bloqueo es un acto hostil e ilegal que viola el Derecho Internacional y es contrario a los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas. Constituye una trasgresión al derecho a la paz, el desarrollo y la seguridad de un Estado soberano y califica como genocidio por su esencia, propósitos e impacto sobre el pueblo cubano en virtud de la Convención de Ginebra de 1948.
El Gobierno de los Estados Unidos debe levantar de manera inmediata e incondicional el bloqueo. Es una política absurda, obsoleta, ilegal y moralmente insostenible, que no ha cumplido ni cumplirá el propósito de doblegar la decisión patriótica del pueblo cubano de preservar su soberanía, independencia y ejercer su derecho a la libre determinación.
Denunciamos la arrogancia y prepotencia del gobierno de Estados Unidos, por despreciar y burlarse del clamor universal para poner fin al genocida bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a la isla.
Muchas gracias.