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Opinión

El gran aislamiento internacional que prepara EEUU contra China después del Covid-19

El gran aislamiento internacional que prepara EEUU contra China después del Covid-19

Escrito por: Felix Antonio Cossío Romero

“Tengo un amigo que se casó con una joven japonesa: viven en la provincia de Milán y tienen una hija de 5 años. Ayer, cuando madre e hija estaban en el supermercado, unos tipos se pusieron a gritarles que la culpa era suya, ¡que se volvieran a China! (Paolo Giordano).

Estados Unidos después de cumplir con éxito su primera etapa, que era disolver el virus Sars-Cov-2 alrededor del mundo: creando millones de infectados y miles de muertos en todo el planeta. Además, del miedo, la censura y el sometimiento por medio de una cuarentena obligatoria impuesta a toda la población. En estos momentos EEUU, inicia su segunda fase que es culpar a China de todo lo sucedido, conformando una coalición internacional con países aliados para detener el imparable crecimiento del gigante asiático.

Así lo informa el destacado periodista francés Thierry Meyssan, en su portal La Red Voltaire el día 12 de junio, de la creación de un grupo parlamentario transatlántico contra China encabezado por EEUU, y donde hacen parte Reino Unido, Australia, Italia, entre otros. Su objetivo, principalmente es aislar a China de la comunidad internacional, evitar el comercio con el gigante asiático lo menos posible, y evitar en gran medida que los países periféricos como los de África y América latina no establezcan tratados comerciales con China, y así retrasar su inminente llegada al control del mundo.

Donald Trump y Mike Pompeo han llamado al Sars-Cov-2 como “el virus chino” y lo han culpado de la crisis sanitaria que afronta el país norteamericano. Trump ha amenazado a China de intensificar la guerra comercial, poniendo aranceles a los productos de ese país e intentar cortar con sus cadenas de suministros, ya que China es uno de los países que más necesita recursos naturales para poder mantener su crecimiento económico.

El coronavirus dio un gran golpe a la economía mundial, a la libertad de mercados y a la globalización. Cuando Francis Fukuyama hablaba del final de la historia y defendía el capitalismo y la democracia liberal, como únicos modelos posibles después del desplome de la URSS, el coronavirus demostró que el sistema es solo un castillo de naipes. Aunque todos los países se han visto afectados, China también sufrió un duro revés para su economía. Su proyecto de La Nueva Ruta De La Seda amenaza con estancarse, debido a que necesita de la globalización, como lo dice el analista internacional Josep Piqué en su libro El mundo que nos viene:

"los territorios recorridos en la nueva ruta de la seda afectan a un tercio del comercio internacional, al 70 por ciento de la población y al 55 por ciento del PIB mundiales y, algo que no carece de importancia a tres cuartas partes de las reservas energéticas fósiles del planeta”. (Piqué, 2019, p. 59).

Teniendo todo esto presente, el Covid-19 retrasa o impide la consolidación de China como potencia hegemónica del planeta. Antes lo habían intentado con el grupo terrorista Daesh, en Iraq y Siria. Buscaban balcanizar el área y crear un emirato suní radical. Y como Iraq y Siria son pasos obligados en La Nueva Ruta de La Seda, pretendían levantar un “nuevo” estado que sería un muro para cortar el paso a China. Tal como lo explica Thierry Meyssan:

“Washington decidió entonces desarrollar Daesh y asignarle como territorio parte de Iraq y de Siria para crear allí un nuevo Estado que cortaría la Ruta de la Seda” (Meyssan, 2017, p.213). Pero como Daesh fue derrotado por el eje de la resistencia, a EEUU, no le quedaba otro camino que llevar el virus a Wuhan y soltarlo en pleno corazón de China. Para después culparla de todo lo acontecido.

El arma biológica que afecta a la humanidad entera, amenaza a China con un aislamiento internacional por parte de occidente, y además, con severas sanciones económicas, (como las  que sufre  Rusia, Irán o Venezuela) y también  dejar estancado el proyecto de La Nueva Ruta de la Seda. Dando más tiempo a EEUU para crear más grupos terroristas e incendiar la Nueva Ruta de la Seda. Por ahora el plan de remodelar todo Oriente Medio, entró en pausa. Todas las armas diplomáticas, políticas, económicas, Biológicas y Nucleares apuntan a Pekín.

Referencias.
1.    Piqué, Josep (2019). El mundo que nos viene. Colombia: Ariel.
2.    Meyssan, Thierry (2017). De la impostura del 11 de septiembre A Donald Trump. México: Orfila.

| 20/06/2020

Lucho

Interesante Esta bien analizado